"Lo que he vivido aquí supera con creces lo que pensaba", así explicaba el pasado mes de mayo la princesa Leonor cómo estaba siendo su experiencia en la Academia General Militar del Ejército de Tierra de Zaragoza. Ahora, ha llegado el momento de empezar a cerrar esta etapa, coger el petate y regresar a casa. De estos meses se lleva grandes amigos, vivencias únicas y la satisfacción de haber superado duros retos. Pero este no es aún el adiós definitivo; será 3 de julio, fecha en la que regresará para recibir el despacho de alférez y pasará a ser dama alférez cadete. Se espera que los Reyes asistan a la cita y que sea su padre quien se lo entregue.
La semana pasada, la princesa de Asturias abandonó ya la academia, en la que ingresó en agosto del año pasado con la maleta llena de ilusiones. Allí ha vivido como una más y sin ninguna distinción por ser la heredera al trono, pero no podrá asistir con el resto de sus compañeros a la ceremonia de clausura del curso, el miércoles 19 de junio, por cuestiones de agenda. Y es que ese mismo día comienzan los actos de conmemoración de los diez años de reinado de Felipe VI, en los que, además de aparecer junto a sus padres en el balcón del Palacio Real, ella y su hermana, la infanta Sofía, harán un recorrido por la Galería de las Colecciones Reales junto a un grupo de 40 jóvenes.
La infanta Sofía regresó también la semana pasada a Madrid, tras finalizar primero de bachillerato en el UWC Atlantic de Gales. Ahora pasarán unos meses de vacaciones juntas antes de que sus caminos vuelvan a separarse, ya que Leonor ingresará en agosto en la Escuela Naval de Marín, en Pontevedra.