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El castillo de Christiansborg de Copenhague es el escenario de una cena en honor de los reyes Felipe y Letizia, que se encuentran en el Reino de Dinamarca en la primera visita de Estado que hacen al país nórdico desde la proclamación del monarca en 2014. Con esta velada que supone un desfile de tiaras e impresionantes joyas concluye el primer día de su estancia, que ha comenzado minutos antes de las dos de la tarde de este lunes 6 de noviembre, cuando han aterrizado en el aeropuerto, y se extenderá hasta el próximo miércoles 8. Tres días con una intensa agenda con la que se busca afianzar las relaciones bilaterales entre ambos territorios y en los que se pone de manifiesto que "nos unen estrechos lazos de amistad y la pertenencia a un proyecto común europeo", tal y como ha resaltado el monarca.
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Margarita de Dinamarca, que es la reina más longeva de Europa y la única reinante tras la muerte de Isabel II el 8 de septiembre de 2022, es la anfitriona en esta cena de Estado a la que también se han sumado los príncipes herederos, Federico y Mary, y la princesa Benedicta, hermana de la monarca. Además, forman parte del amplio listado de asistentes autoridades, representantes de las empresas danesas y españolas así como figuras de la cultura y el deporte como Michael Laudrup, que fue jugador del Real Madrid y del FC Barcelona, y el ciclista Jonas Vingegaard, ganador del Tour de Francia en 2022 y 2023.
-Mary de Dinamarca elige un fabuloso vestido brillante con transparencias y guiño a España
Para esta velada, la reina Letizia, con vestido azul oscuro de Felipe Varela, ha escogido una de las piezas más importantes del joyero de la Familia Real española: la Tiara de Lis, creada en 1906 por la firma española Ansorena en platino y brillantes con charnelas que representan la flor de lis heráldica de los Borbones, unidas por motivos vegetales de diamantes. Esta diadema fue un regalo de Alfonso XIII a su prometida, la princesa Victoria Eugenia de Battenberg, quien la llevó el día de su boda, el 31 de mayo de 1906. La primera vez que la esposa de Felipe VI usó esta pieza fue en febrero de 2017 durante una cena de gala celebrada en el Palacio Real en honor al presidente de Argentina. La última vez que la llevó fue hace justo dos años durante una cena de gala en Suecia.
La princesa heredera Mary se ha decantado por un vestido azul de pedrería firmado por Lasse Spangenberg, ajustado en la cintura y con transparencias en la parte alta del pecho. Se trata de una creación muy importante para ella ya que es la que lució en los retratos oficiales que se hizo por su 50 cumpleaños, el 5 de febrero de 2022. La tiara, convertible en collar, no forma parte del joyero de la Casa Real danesa. La primera vez que llevó esta diadema fue en los festejos por el 75 cumpleaños de la reina Margarita, acontecimiento en el que también estuvieron don Felipe y doña Letizia.
-Estas son las prestigiosas condecoraciones que han recibido los Reyes en Dinamarca y su significado
Un susto, el menú y una lista musical made in Spain
Antes de acceder a la cena, los anfitriones y los Reyes de España han saludado personalmente a los invitados, que poco a poco han ido colocándose en el comedor. Mientras llegaban los asistentes se ha producido un incidente ya que uno de los soldados ha sufrido un desmayo y ha caído desplomado al suelo. Escasos segundos después dos de sus compañeros lo han evacuado. Se trata de un miembro de los Royal Life Guards, en danés Den Kongelige Livgarde, un regimiento fundado por Federico III el 30 de junio de 1658 que actualmente lleva a cabo tareas ceremoniales y de vigilancia para la Casa Real de Dinamarca.
El menú de la velada está compuesto por soufflé de lenguado con verduras a la Barigoule, muslo de gamo de Trend (región en la que la Familia Real tiene un pabellón de caza y le gusta ir de vacaciones) con timbal de col, cerezas de Graasten (donde pasan el verano) y salsa grand veneur, pastel de setas con berros de Esrum Sø y pastel de la Concordia. En cuanto a la banda sonora de la noche, interpretada por la banda de música de la Royal Life Guards y con toques españoles, se incluye el pasodoble Amparito Roca de Jaime Texidor; Viva la vida, de Coldplay; La Sorella March, de Charles Borel-Clerc; El relicario, de José Padilla.
El banquete de Estado coincide con una fecha llena de significado para los Reyes: el 20 aniversario de su pedida de mano, celebrada el 6 de noviembre de 2003 a las 12: 30 horas en el Palacio de El Pardo. Protagonizaron una sesión de fotos en los jardines, pasearon de la mano y comparecieron juntos por primera vez ante más de 300 periodistas acreditados. El entonces príncipe de Asturias y la periodista Letizia Ortiz contaron que se habían conocido de forma casual hacía más de un año y querían tener “por encima de dos hijos y por debajo de cinco”. Seis meses después, precisamente en Dinamarca, donde acudieron a la boda de los príncipes Federico y Mary, se produjo la presentación de doña Letizia ante la realeza internacional.
En 1928 se creó el castillo de Christiansborg tal y como lo conocemos en esta era, pero este recinto palaciego existe desde 1740 y se quemó en dos ocasiones. En la actualidad es el lugar de trabajo de la Casa Real, el Ministerio de Estado y el Folketing (el Parlamento). Además, es usado por la monarca para eventos oficiales, como cenas de gala y audiencias públicas. Al margen de estos acontecimientos, está abierto al público para visitas y destacan cinco puntos: las Salas Reales de Recepción con el Gran Salón y los Tapices de la Reina, las Caballerizas Reales, la Cocina Real de Banquetes, las ruina y la iglesia.
Las palabras del rey Felipe sobre la princesa de Asturias y el príncipe Christian
Durante la cena, celebrada en el Gran Salón en el que se han dispuesto en una enorme mesa en forma de U, el jefe del Estado ha intervenido con un discurso en el que ha quedado patente el gran cariño que existe entre ambas Casas Reales. Ha calificado de ejemplar el reinado de Margarita y ha recordado nuestro pasado común gracias a la boda de la infanta espaloóla Isabel de Austria con Christian II, un matrimonio que la convirtió en Reina consorte de Dinamarca.
Además, ha recordaro la proximidad y parentesco y ha hablado del acontecimiento que ha supuesto en ambas familias la mayoría de edad de sus príncipes: "Es también motivo de alegría compartida que seamos testigos casi en paralelo del importante hito que supone la mayoría de edad del Príncipe Christian y la Princesa Leonor. Ellos son la nueva generación que representa la continuidad en el compromiso de ambas Monarquías parlamentarias, respectivamente, con su Nación, su pueblo y su democracia, en el seno de la Unión Europea.
Margarita de Dinamarca, que es hermana de Ana María de Grecia, tía materna de don Felipe, ha concedido a los Reyes la Orden del Elefante en el Palacio de Christian VII en Amalienborg. Se trata de la Orden Real de Caballería danesa más antigua puesto que sus raíces se remontan al siglo XV y se otorga principalmente a miembros de la realeza y a los jefes de Estado. Desde 1693, las insignias están compuestas por una figura del citado animal realizada en oro con esmalte blanco y adornada con diamantes sobre el que hay una torre. Hace tres semanas, el 15 de octubre, con motivo de su 18 cumpleaños, el príncipe Christian, segundo en la línea sucesoria, recibió esta Orden que lució en su traje durante la cena de gala que se hizo esa misma noche.
Es una tradición que durante visitas de Estado se lleve a cabo un intercambio de órdenes de caballería y medallas. Es por eso que los reyes Felipe y Letizia también han condecorado a los príncipes Federico y Mary con la Gran Cruz de la Orden Española de Isabel la Católica. Fue instituida por Fernando VII el 14 de marzo de 1815 y tiene por objeto “premiar aquellos comportamientos extraordinarios de carácter civil, realizados por personas españolas y extranjeras, que redunden en beneficio de la Nación o que contribuyan, de modo relevante, a favorecer las relaciones de amistad y cooperación de la Nación Española con el resto de la Comunidad Internacional”.
Esta primera jornada del viaje ha comenzado con la Familia Real danesa recibiendo a los Reyes con los máximos honores al bajar del avión y ha incluído una recepción oficial en el Palacio de Christian VII así como un encuentro de Felipe VI con la primera ministra Mette Federiksen. Además, antes de la cena, el monarca ha protagonizado un simpático reencuentro con su ahijado, el príncipe Vincent, que tiene 12 años y es hijo de Federico y Mary de Dinamarca. Es el gemelo de la princesa Josephine y el hermano menor de los príncipes Christian e Isabella, quienes son como Leonor de Borbón y la infanta Sofía, respectivamente.