El rey Felipe VI impondrá a la princesa Leonor el collar de la Real y Distinguida Orden de Carlos III, la máxima condecoración civil que existe en España, el día que cumple su mayoría de edad y después de jurar la Constitución ante las Cortes Generales. Este reconocimiento está reservado a miembros de la Familia Real y jefes de Estado y de Gobierno y a aquellos ciudadanos españoles que posean la Gran Cruz con más de tres años de antigüedad. Esta orden distingue a las personas que destacan por sus buenas acciones en beneficio de España y de la Corona. Una distinción que recibió don Juan Carlos de Borbón y Borbón-Dos Sicilias en 1962, siendo infante de España, y Felipe de Borbón y Grecia en 1986 como príncipe de Asturias, de Girona y de Viana.
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La princesa Leonor formará parte de este grupo de personas que tienen el Collar de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III, la máxima distinción honorífica entre las Órdenes Civiles españolas. Además de los miembros de la Familia Real, entre las personalidades a las que se ha otorgado el Collar destacan Marcelo Rebelo de Sousa, presidente de Portugal; Enrique Peña Nieto, expresidente de México; Michelle Bachelet, expresidente de Chile, y Nicolas Sarkozy, ex presidente de Francia, entre otros. Adolfo Suárez, expresidente del Gobierno de España, recibió esta condecoración en 2014 a título póstumo, al igual que ocurrió con Leopoldo Calvo Sotelo, que en 2008 fue distinguido con el Collar de Carlos III también a título póstumo.
El origen del Collar de Carlos III que recibe la princesa Leonor, se remonta al siglo XVIII, cuando el rey Carlos III la estableció en 1771 con el lema “Virtuti et merito” (Virtud y mérito). Carlos III buscaba condecorar a las personas que hubieran destacado especialmente por sus "buenas acciones" en beneficio de España y de la Corona.
La Real y Distinguida Orden Española de Carlos III consta de los siguientes grados: Collar, Gran Cruz, Encomienda de Número, Encomienda y Cruz. La concesión del Collar, grado máximo de la Orden, puede recaer en los miembros de la Familia Real, los Jefes de Estado y de Gobierno y en aquellos ciudadanos españoles que estén en posesión de la Gran Cruz con más de tres años de antigüedad. Este reconocimiento se puede conceder a un máximo de 25 ciudadanos de nacionalidad española vivos, pero en este número no se incluyen los miembros de la Familia Real española.
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El collar, tal y como se describe oficialmente, está compuesto por 41 eslabones de la siguiente manera: la cifra de oro del Monarca que da nombre a la Real Orden, orlada de palma y laurel de oro, esmaltados en verde y rojo; seguida por dos leones y dos castillos de oro así como un trofeo de guerra compuesto por un casco de caballero de oro y dos banderas en aspa, la puesta en banda de oro, esmaltada en rojo, acompañada de un bastón de oro, y la puesta en barra esmaltada en azul, acompañada por un haz de líctor de oro, todo orlado de hojas de laurel esmaltadas en verde. A esta secuencia le sigue otra de castillo, león, cifra, león, castillo, trofeo... De la de la cifra, que figurará como central, penderá la venera de la Orden, mediante dos cadenillas de oro.
La venera de la Real Orden es una cruz de oro con cuatro brazos simétricos dos a dos rematados por ocho esferas de oro, cuyo centro es esmalte azul añil, contornado por una franja de esmalte blanco. En cada entrebrazo figura una flor de lis de oro pulido. En el anverso, en exergo, sobrepuesto un óvalo de oro, orlado de esmalte azul, en cuyo centro se ve la imagen de la Purísima Concepción en sus esmaltes. En el reverso, lleva un óvalo en cuyo centro, esmaltado en azul, con la cifra de Carlos III de oro, orlada con la leyenda Virtute et merito de oro, sobre esmalte blanco. Esta cruz va coronada por dos ramas de laurel de oro, anudadas por un lazo de esmalte azul.