La princesa Leonor ha visitado por primera vez de manera oficial la Academia General Militar de Zaragoza, la misma en la que ingresará dentro de poco más de un mes, el próximo 17 de agosto, para comenzar su formación militar de tres años. La heredera ha acompañado a sus padres los Reyes (la Reina no suele acudir aunque ha hecho una excepción), quienes han presidido el acto de entrega de despachos de empleo y nombramientos a los nuevos oficiales del Ejército de Tierra. Este acto se ha producido solo dos días después de su paso por tierras catalanas para participar en las actividades con motivo de la entrega de los Premios Princesa de Girona, donde se confesó ilusionada con el siguiente paso en su formación.
La princesa Leonor, más parecida a su madre que nunca con un look de lunares y tacones destalonados
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La princesa de Asturias llevaba un vestido blanco con lunares en negro, un modelo sin mangas con el detalle de una lazada al cuello en el que llevaba prendido el Toisón de Oro (condecoración que le otorgó su padre en 2018). El Rey llevaba el uniforme del ejército de tierra mientras que doña Letizia escogió también el color blanco para un conjunto de falda y chaleco ceñido a la cintura.
Quienes han recibido el reconocimiento de manos del Rey, en total 382 nuevos oficiales del Ejército de Tierra y la Guardia Civil, han completado su formación en la Academia y en las respectivas academias específicas (Infantería, Artillería, Caballería, Ingenieros, Transmisiones y Guardia Civil). Seguro que la princesa de Asturias está atenta a cada detalle, tanto del comportamiento de los cadetes como del recinto, pues dentro de tan solo una semanas, ella misma será dama cadete en este centro en el que tendrá clases de lunes a viernes con los fines de semana libres, a no ser que se encuentre de maniobras. Aunque la hermana de la infanta Sofía tiene derecho a una retribución económica que ronda los 400 euros, la Casa Real ya aclaró que no cobraráningún sueldo por esta formación. Durante la cita se pudo ver a Leonor conversando con su madre en el palco reservado a las autoridades y, como cuenta ABC, su padre le dijo al finalizar el acto que un día ella también estará en el lugar de los cadetes.
El acto se ha desarrollado de la siguiente manera: se han rendido honores al Rey y a la Princesa y luego ha tenido lugar la imposición de condecoraciones y entrega de Reales Despachos a los números uno. El primero se ha entregado a título póstumo a Pablo Jérez Sanjuán, que falleció en un ejercicio de la Academia el 6 de septiembre de 2021. Como informa el Heraldo de Aragón, doña Letizia se ha mostrado especialmente cercana con sus familiares. Se entregaron luego los Reales Despachos al resto de Oficiales y el General Director de la Academia pronuncia unas palabras. El evento ha terminado con un homenaje a los que dieron su vida por España, tras lo que se ha escuchado el himno de la Academia General Militar y han desfilado las tropas. El "rompan filas" llegó acompañado del tradicional lanzamiento de gorras al aire por parte de los cadetes. La princesa Leonor se ha sentado junto al general director de la Academia, Manuel Pérez López, con quien estuvo conversando.
En el evento estuvo además la ministra de Defensa, Margarita Robles, el presidente del Gobierno aragonés en funciones, Javier Lambán; la presidenta de las Cortes de Aragón, Marta Fernández, el delegado de Gobierno, Fernando Beltrán; la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, y el rector de la Universidad de Zaragoza, José Antonio Mayoral.
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La Academia General Militar es el centro responsable del Ejército de Tierra de la enseñanza de formación militar general y específica, de la formación técnica que corresponda y de la formación de especialidades fundamentales. También le corresponde la responsabilidad del encuadramiento de los alumnos y de dirigir y gestionar su régimen de vida. En particular, le corresponde impartir las enseñanzas de la formación militar del plan de estudios de la escala de oficiales del Cuerpo General del Ejército de Tierra a los alumnos ingresados sin titulación, de la escala superior de oficiales de la Guardia Civil, de los cuerpos de intendencia e ingenieros politécnicos del Ejército de Tierra, de los cuerpos comunes de las Fuerzas Armadas y de la escala de oficiales del cuerpo general de tierra a los alumnos ingresados por promoción interna con titulación, así como la enseñanza.
Esta visita a Zaragoza ha sido distinta a otros actos militares para la princesa Leonor y le ha servido seguro como antesala para su desembarco como soldado. Precisamente en el discurso que pronunció durante la entrega de los premios Princesa de Girona hizo alusión a su próximo reto que tanto la entusiasma. “ En mi caso, tengo casi dieciocho. Acabo de terminar el bachillerato y estoy a punto de iniciar una nueva etapa con un periodo de formación militar. Y, más allá de mi responsabilidad, estoy contenta porque sé cuánto valoran los españoles a nuestras Fuerzas Armadas”.
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Este será el inicio de tres años de profunda inmersión de la heredera en el ámbito militar. Tras Zaragoza, en su segundo año le tocará pasar por la Escuela Naval de Marín (Pontevedra) y en el tercero recalará en la Academia General del Aire de San Javier (Murcia), donde se incorporará a los estudios de cuarto año. Será en su paso por la Armada cuando realice la tradicional travesía en el Juan Sebastián Elcano, la misma que hizo su padre durante seis meses en 1987. Tras estos estudios castrenses, fundamentales cuando en un futuro se convierta en Reina y asuma el mando supremo de las Fuerzas Armadas, comenzará su formación universitaria y, después, seguramente un posgrado.
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Tras este acto y su internamiento en Zaragoza, Leonor tendrá por delante otro gran acto de carácter militar. El 15 de octubre, dos semanas antes de que cumpla los 18 años, jurará, con un beso en la bandera nacional, defender España, aún a costa de la propia vida. Lo hará en el Patio de Armas sobre la misma enseña en la que también juraron su abuelo y su padre y que se confeccionó en 1886 por encargo de la reina María Cristina. Unos días antes, es posible que la veamos vestida de uniforme por primera vez en el desfile del 12 de Octubre.
Zaragoza, escenario de esta nueva aparición de la princesa de Asturias, trata de recuperarse todavía de las consecuencias devastadoras de la intensa tormenta de lluvia y granizo que provocó diversas incidencias en la ciudad debido a la fuerza del agua. Los daños se han producido sobre todo en la zona del Bajo Aragón y en el barrio parque Venecia de la ciudad.