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Descubre todas las claves de los Premios Princesa de Asturias

Los Reyes, en presencia de la princesa Leonor y la infanta Sofía, han presidido la cuadragésima segunda edición en el Teatro Campoamor, de Oviedo

Actualizado 29 de octubre de 2022 - 12:17 CEST29 oct 2022 - 12:17 CEST

El regreso de la princesa Leonor

Los Premios Princesa de Asturias tienen el objetivo de promocionar los valores científicos, culturales y humanísticos que son patrimonio universal y como tal, es un día para homenajear a los galardonados en ocho categorías, sin embargo, estos premios están estrechamente vinculados con el título de la heredera de la Corona de España y eso convierte a la princesa de Asturias en la otra gran protagonista. En su cuarta edición (para la princesa Leonor, ya que los premios tienen a sus espaldas cuarenta y dos ediciones) la hija de don Felipe y doña Letizia ha dominado por completo este escenario, el del Teatro Campoamor de Oviedo, en el que se encuentra cómoda.

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Aforo completo

Este año ha vuelto al teatro Campoamor la "normalidad" tras la pandemia y de dos ediciones organizadas bajo restricciones sanitarias. Por fin ya no ha sido necesario sonreír solo con los ojos y han vuelto los gestos cercanos y los apretones de manos. En este 2022 se ha recuperado el aforo habitual en teatro oventense: 1.307 butacas.

La complicidad de un rey, la emoción de un padre

El rey Felipe VI es un hombre de gestos afables pero medidos, no obstante, hay dos variables que le emocionan: los Premios Princesa de Asturias (un compromiso que asumió desde niño) y su trabajo como padre. Los Reyes prescindieron de guías, tutores, preceptores o consejeros para la educación y crianza de la princesa Leonor y la infanta Sofía, optaron por ser ellos mismos los que las prepararan y disfrutan de los pasos de la heredera de la Corona. El orgullo que siente lo ha plasmado en su discurso.

La sorpresa de la tarde

No estaba en el guion y ha sido uno de los momentos más emotivos de la tarde (junto con el discurso de Juan Mayorga, que ha demostrado que es único haciendo magia con las palabras, con las que ha dicho tener "una relación "íntima y apasionada"), Carmen Linares y María Pagés (que han recibido el galardón a las Artes) se han arrancado con una escueta pero preciosa pieza sobre las raíces del flamenco, un género que ellas han sabido modernizar y elevar.

Leonor, del 'me importa' al optimismo

El discurso de la princesa Leonor, que se ha hilado siguiendo el patrón de comenzar cada párrafo con las palabras "me importa", ha sido más contundente que en años anteriores, ha alabado el "europeísmo optimista" de Adam Michnik y de la dignidad que aportan personas como Shigeru Ban a los que lo han perdido todo en las peores circunstancias. El final de sus palabras ha tomado un tono esperanzador y ha seguido la línea de sus discursos anteriores, el de llegar a las nuevas generaciones: "Los jóvenes somos conscientes de que la situación actual no es fácil, de que el mundo ha cambiado y sigue cambiando […] Por eso, en días como hoy, escuchar, admirar y reconocer la excelencia de nuestros premiados nos hace sentir que las cosas siempre pueden cambiar para bien".

Muy presente la herida de Europa

Los galardones Princesa de Asturias están vinculados a la actualidad, al devenir de la humanidad y a lo que acontece en cada momento. En esta edición las alusiones a la invasión rusa de Ucrania han sido constantes durante toda la ceremonia, también en el discurso de Felipe VI que ha recordado que la guerra en Ucrania dura ya ocho largos meses.

Ocho galardonados

Tres de los ocho galardonados han estado vinculadas de alguna forma a paliar los dolorosos efectos que esta invasión está provocando: la Fundación Olímpica para los Refugiados y el Equipo Olímpico de Refugiados; el activista de la arquitectura Shigeru Ban, que da respuestas rápidas a personas sin casa en situaciones extremas; y el polaco Adam Michnik, destacado defensor de los derechos humanos y periodista que ha sido muy crítico en su discurso con Vladímir Putin. Los categorías han sido para Carmen Linares y María Pagés (Artes); Eduardo Matos Moctezuma (Ciencias Sociales); Ellen Macarthur (Cooperación Internacional); Geoffrey Hinton, Yann Lecun, Yoshua Bengio y Demis Hassabis (Investigación Científica y Técnica) y Juan Mayorga (Letras).

Eldric Sella y Masomah Ali Zada: representantes de la esperanza

Thomas Bach, presidente del COI, ha recogido el Premio Princesa de Asturias de Deportes, acompañado por dos refugiados: el boxeador venezolano que reside en Uruguay, Eldric Sella, y la ciclista afgana que vive en Francia, Masomah Ali Zada. Ellos son dos ejemplos del trabajo de la Fundación Olímpica para los Refugiados y el Equipo Olímpico de Refugiados, ellos representan a todos los refugiados del mundo y son un símbolo de esperanza que se ha hecho visible en Oviedo para todos aquellos que en encuentra en el deporte una vía humanitaria.

La amistad entre México y España: ejemplo del poder blando de cultura

El actual presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reveló en el 2019 que pidió por carta al rey de España Felipe VI y al papa Francisco que se disculparan por "los agravios" por los españoles durante la conquista del actual México. Muestra del enorme poder diplomático que tiene la cultura, hoy Eduardo Matos Moctezuma, galardonado con el premio Ciencias Sociales, erudito y promotor del mundo prehispánico mexicano que ha desarrollado su trabajo en enclaves arqueológicos como Comalcalco, Tepeapulco, Bonampak, Teotihuacán, Cholula, Tula, Tlatelolco y Tenochtitlán, entre otros, ha dado un discurso de reconciliación. Matos Moctezuma recordó la llegada de Cortés a México, recordó detalles de la conquista –de la de la tierra y de la del espíritu- y terminó analizando cómo finalmente se tendieron lazos diplomáticos. "En 1836 nuestros dos países acordaron el tratado de paz y amistad y entablaron relaciones diplomáticas después de largas luchas, México reconocía a España y España reconocía a México como nación independiente. Buen ejemplo para superar pasados agravios […] Toda guerra conlleva muerte […] España lo ha vivido en carne propia y México también Esto no se olvida, pero tampoco podemos anclarnos en el pasado y guardar rencores, sino mirar hacia adelante. En esto, México y España debe dirigirse hacia un futuro promisorio". Un discurso que ha cerrado con palabras del escritor y filósofo español Miguel de Unamuno.

Reina Sofía, activa en la agenda de la Casa Real

La reina Sofía nunca falla este día, desde la primera edición, la que se celebró en 1981, y en esta 42ª edición ha sido recibida con una gran ovación a su llegada al palco de honor del teatro. Doña Sofía sigue estando activa en la agenda de la Casa Real y antes de viajar a Asturias, en la tarde del jueves, acudió al El Escorial para entregar a Carmen Iglesias, directora de la Real Academia de Historia, el galardón Historia Órdenes Españolas.

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