Un día después de que el rey Felipe hiciera público su patrimonio que asciende a 2.573.392,80 euros, el Consejo de Ministros ha aprobado un real decreto que establece que las cuentas de la Casa Real serán auditadas por primera vez por el Tribunal de Cuentas, los altos cargos de la Jefatura del Estado tendrán que hacer pública su declaración de bienes y todos los regalos que se reciban serán inventariados y custodiados y se decidirá qué hacer con ellos.
Con la nueva norma, "la monarquía española da un paso adelante, avanza en transparencia y se homologa a otras Casas Reales. Ayer [por este lunes] supimos el patrimonio del Rey, un ejemplo más de la transparencia que está implementando la Casa Real durante todo el reinado de Felipe VI", en palabras del ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños.
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Así, los nuevos cambios introducidos afectan a una nueva regulación de toda la contratación de la Casa Real, en aras de alcanzar mayor transparencia. Se introduce el principio de publicidad en todas las contrataciones, que se publicarán en la página web, las cuentas de la Casa Real serán auditadas por el Tribunal de Cuentas para situar en palabras del ministro Bolaños "los mayores estándares de ejemplaridad y transparencia" en la primera institución del Estado. También, todo el personal de la Casa Real deberá ejercer sus funciones con arreglo a la conducta que rige la Jefatura del Estado y los altos cargos deberán publicar su declaración de bienes anualmente y tanto a su nombramiento como al cese de su actividad como hacen los altos cargos del Estado. Además, todos los regalos que lleguen al Palacio de la Zarzuela serán inventariados y custodiados y tras un estudio se decidirá si permanecen en la Corona, pasan al Estado o se donan a entidades sin ánimo de lucro.
En un comunicado oficial, Felipe VI hizo público este lunes su patrimonio que asciende a 2.573.392.80 euros, de los que 2.267.942,80 euros corresponden a depósitos en cuentas corrientes o de ahorro y valores representativos de la participación en fondos propios de cualquier entidad. La parte restante, 305.450,00 euros, pertenecen a objetos de arte, antigüedades y joyas de carácter personal que han sido objeto de la correspondiente tasación. En la declaración también se apunta a que el patrimonio del monarca está principalmente constituido por las retribuciones que ha percibido de los presupuestos de la Casa de S. M. el Rey a lo largo de estos últimos 25 años; primero como Príncipe de Asturias, a partir de 1998, y posteriormente como Rey, a partir de 2014. Dichas retribuciones ascienden a la cantidad bruta de 4.275.796,94 euros. "De dichas cantidades han de deducirse las retenciones fiscales practicadas, así como el importe de los impuestos satisfechos a lo largo de esos 25 años".