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Atenas, 23 de octubre. 17 horas. A esa hora, Nina Nastassja Flohr hará su entrada en la catedral de la Anunciación de Santa María para casarse con el príncipe Philippos de Grecia y Dinamarca, hijo de los Reyes Constantino y Ana María. La novia caminará hasta el altar del brazo de su padre, el magnate suizo Thomas Flohr, conocido como el “rey de los jets privados”. En la primera fila del templo habrá auténticos reyes y príncipes de Europa, incluidas Doña Sofía y Doña Elena. Según ha podido saber ¡HOLA!, la madre y la hermana de Felipe VI han confirmado su asistencia al enlace. La Reina es tía del novio, y la duquesa de Lugo es su prima y madrina de bautizo.
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La boda de Philippos y Nina será una cita especial para Doña Sofía, ya que ese sábado regresará al lugar donde se casó con Don Juan Carlos hace casi sesenta años. La Reina, entonces princesa de Grecia, dio el ‘sí, quiero’ al príncipe Juan Carlos de Borbón y Borbón, hijo de los Condes de Barcelona, en la catedral metropolitana de Atenas el 14 de mayo de 1962. Seguramente, la madre de Don Felipe recordará los momentos importantes de su enlace, que contó con la presencia de la “decana de las reinas de Europa” de su tiempo: Victoria Eugenia, viuda de Alfonso XIII y abuela del novio.
Doña Sofía brilló en su boda con un vestido de Jean Desses, un famoso diseñador egipcio -pero de origen griego- que en esa época estaba muy de moda y vestía a celebridades como la duquesa de Windsor. La novia completó su estilismo con una diadema de diamantes, regalo de su madre, la Reina Federica, y zapatos de Roger Vivier. Sofía eligió decorar la catedral con rosas rojas, sus flores preferidas. Bajo una bóveda pintada de estrellas, dio el ‘sí, quiero’ a Don Juan Carlos con una antigua fórmula de educación: ‘Malista dexome’ (’Sí, yo acepto’). Su hermano, Constantino, hizo de “koumbori”, o padrino de boda, y la realeza europea al completo fue testigo de la unión, que también contó con la bendición del Papa Juan XXIII.
La catedral de la Anunciación de Santa María, también conocida popularmente como Mitrópoli, tiene un enorme valor simbólico e histórico para la familia real helena: Otón I, primer rey de Grecia, ordenó su construcción en 1842. El 18 de septiembre de 1964, el templo vivió su máximo esplendor, al contraer matrimonio el entonces Rey Constantino II de Grecia con la princesa Ana María de Dinamarca. Asistieron representantes de todas la casas reales europeas y árabes y fue la única boda de un monarca heleno celebrada allí.
Cincuenta y siete años después, Constantino verá casar a su hijo pequeño, Philippos, en el mismo lugar donde él juró amor eterno a Ana-María. Philippos, de treinta y cinco años, pidió matrimonio a la heredera Nina Flohr el verano del año pasado mientras disfrutaban de sus vacaciones en la isla griega de Ítaca. En diciembre de ese mismo año, la pareja se casó por lo civil, y en la más absoluta intimidad, en St. Moritz, Suiza. Un enlace al que asistieron Doña Cristina y su hija, Irene Urgandarin.
El día anterior a la gran boda real griega de Philippos y Nina, se celebrará la entrega de los Premios de Asturias 2021 en el Teatro Campoamor de Oviedo. Doña Sofía tiene la costumbre de asistir al acto y es probable que no se pierda esta edición, aunque su presencia no está confirmada. Este año será especial ya que servirá como escenario para la reaparición pública de la Princesa Leonor, que se encuentra cursando el Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales.
