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Los Reyes y sus hijas continúan disfrutando de su estancia en Mallorca y anoche acudieron a cenar a El Txoko de Martín, el restaurante que el chef vasco Martín Berasategui abrió el pasado 19 de mayo en la zona de Santa Catalina, cercana al paseo marítimo, donde hay bastantes locales de restauración. La llegada de don Felipe y su familia fue una auténtica sorpresa para el resto de comensales. Algunos sacaron sus teléfonos móviles para inmortalizar este inesperado encuentro y otros aprovecharon la ocasión para saludarles. Aunque el resturante de Martín Berasategui dispone de una gran terraza, los Reyes y sus hijas cenaron dentro. Entre los platos que pudieron degustar destacan los embutidos ibéricos y quesos seleccionados, las tapas de siempre (tortilla, ensaladilla, mejillones...), los platos de cuchara (sopa de centolla a la donostiarra), arroz de marisco, pescado, carne y postres como flan de huevo al caramelo con chantilly envejecido o torrija caramelizada con tiramisú helado y crema de almendras.
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Los Reyes y sus hijas llegaron a El Txoko de Martín poco antes de las nueva de la noche y se fueron sobre las 23:30 horas. A la salida del restaurante, posaron para los fotógrafos. Doña Letizia se mostró muy cariñosa con la princesa Leonor, a quien dio la mano mientras paseaban y saludaban a las personas que se dieron cuenta de su presencia.
Cabe recordar que los Reyes mantienen una buena amistad con Berasategui desde hace varios años. La última vez que coincidieron con él fue el pasado 24 de junio en el Palacio de El Pardo de Madrid, cuando le entregaron la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes junto a otras figuras del mundo del arte y de la cultura, como Rossy de Palma o Martirio. Además, la princesa Leonor y la infanta Sofía tienen una gran afición por la cocina y por programas gastronómicos como MasterChef, en el que suele colaborar el laureado cocinero guipuzcoano.
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Para esta nueva salida por Palma, los Reyes eligieron un estilismo más informal. Don Felipe combinó una camisa con un vaquero y doña Letizia presumió de bronceado con un original vestido rosa con detalles negros y unas cómodas alpargatas. La princesa Leonor, de 15 años, llevaba una falda vaquera con un top blanco y alpargatas a juego. La infanta Sofía, de 14 años, combinó un mono azul con una camiseta blanca y unas alpargatas exactas a las de su hermana. Los cuatro llevaban también mascarilla quirúrgica.
Los Reyes y sus hijas llegaron el 31 de julio a Mallorca para pasar su tradicional estancia de verano en la isla balear. Don Felipe y doña Letizia, acompañados por la princesa Leonor y la infanta Sofía, se instalaron como cada año en el palacio de Marivent, donde ya les esperaba desde hace días la reina Sofía. Desde entonces, tanto el monarca como su esposa se han dejado ver por Palma cumpliendo con su agenda oficial y deportiva, ya que don Felipe ha vuelto a participar en la Copa del Rey MAPFRE de vela. Pero también disfrutando de diversos planes en familia que no estaban programados, como la cena de anoche o la del pasado sábado con la reina Sofía, la princesa Irene de Grecia, hermana de la reina Sofía, su amiga Tatiana Radziwill y el esposo de ésta, Jean Henri Fruchaud.
Esta velada en el restaurante de Martín Berasategui ha sido, previsiblemente, el colofón al verano de la Familia Real en Mallorca. Su estancia ha estado marcada por el reciente fallecimiento de la abuela paterna de doña Letizia, Menchu Álvarez del Valle. Y ha supuesto un antes y un después para todos ellos, ya que a finales de agosto o principios de septiembre la princesa Leonor se separará por primera vez de sus padres y su hermana para estudiar Bachillerato en Gales.