El fallecimiento de Menchu Álvarez del Valle, de 93 años, ha sido sin duda un duro golpe para su nieta, la reina Letizia. La despedida de la periodista radiofónica tenía lugar esta mañana en la más estricta intimidad, en una ceremonia en la que Jesús Ortiz, padre de la Reina, y Henar, su tía, han estado arropados por un pequeño grupo de familiares y amigos. Doña Letizia no ha acudido al cementerio de Sardéu ni tampoco ha podido hacerlo el rey Felipe, pues la noticia se conoció mientras el Monarca viajaba a Perú, donde asistirá a la toma de posesión del presidente peruano electo, Pedro Castillo, en Lima. A su llegada, el martes a última hora, don Felipe participó en diversas reuniones en las que manifestó, no con palabras sino con un significativo gesto, su tristeza por el fallecimiento de la abuela de doña Letizia.
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Así hablaba la abuela de doña Letizia en su última entrevista: 'No hay nada mejor que ser abuelina'
Todas las veces que Menchu Álvarez del Valle nos arrancó una sonrisa
Cuando aterrizó en el país sudamericano, don Felipe llevaba un traje de color claro que cambió luego por uno negro, un tono oscuro igual que el de su corbata con el que mostró su tristeza. El Rey mostró así el luto por la pérdida en los diversos encuentros que acapararon sus primeras horas en el país. Tuvo una reunión con los representantes de la colectividad española en el país (entonces todavía vestía el traje en tono gris claro con corbata azul) y posteriormente, ya con el traje oscuro, asistió al acto de homenaje al Perú en la Plaza de Armas de Lima, se reunió con Pedro Castillo, el presidente electo de la República del Perú y también con el presidente de la República del Perú, Francisco Sagasti, quien ofreció una cena a los jefes de Estado y de Gobierno asistentes a los actos de toma de posesión.
Menchu, la mujer que inspiró a una reina
La cita institucional que investirá al nuevo presidente será el último de los compromisos de don Felipe, que regresará a España para reunirse con su familia. Esta semana la agenda de la reina Letizia estaba libre de compromisos oficiales, pues su último compromiso en solitario fue la semana pasada cuando mantuvo una reunión de trabajo de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) en Madrid. El domingo 25 de julio acudía, junto al Rey y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, a la tradicional Ofrenda al Apóstol en el Día de Santiago que tuvo una connotación muy emotiva, no solo por ser año jacobeo, sino porque la capilla mayor de la Catedral de Santiago de Compostela llevaba dos años en restauración y, además, fue la primera ocasión en que sus hijas los acompañaban a la capital gallega. El próximo 1 de agosto está previsto el siguiente acto de la Reina en solitario con motivo de la undécima edición del Atlántida Mallorca Film Fest. La reina Sofía espera ya a la Familia Real en la isla para disfrutar de las vacaciones estivales, que tristemente comienzan con este duro golpe.
María del Carmen Álvarez del Valle, más conocida como Menchu, la abuela de la Reina, falleció el 27 de julio a los 93 años de edad en su casa de Ribadesella, en Asturias, donde residió la mayor parte de su vida. Doña Letizia tenía una gran conexión con su abuela, pues fue ella la responsable de que decidiera enfocar su carrera profesional hacia el periodismo. Menchu fue un ejemplo de profesionalidad y talento, una pionera de las ondas con más de cuatro décadas de impecable trayectoria. Ella misma se definía como una "enamorada de la radio" y siempre dijo que le gustaría ser recordada como una mujer muy fiel a su trabajo.
La bisabuela de la princesa Leonor y la infanta Sofía ha recibido la despedida que quería, un adiós íntimo, sin flores, antes de que sus restos fueran sepultados en el cementerio de El Carmen, el mismo campo santo en el que están enterrados su marido, José Luis Ortiz Velasco, fallecido en 2005 y con quien estuvo casada desde 1949; y su hija, Cristina Ortiz, que murió en 2001.