Don Felipe y doña Letizia llevan recorridos cientos de kilómetros desde que el pasado 23 de junio iniciaron una gira por España que arrancó en Canarias. Tras el fin del estado de alarma, los Reyes recorrerán este mes todas las comunidades autónomas para dar un impulso al turismo, apoyar el regreso a la actividad y dar las gracias, región por región, por los esfuerzos realizados en la lucha contra el coronavirus. Tras visitar la huerta murciana, Felipe VI y su mujer se han desplazado a Aragón, en la que es la séptima etapa de su periplo nacional, en un viaje en el que han conocio más sobre el antiguo reino aragonés y sobre los atractivos turísticos de los Pirineos.
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El primer destino de su paso por tierras aragonesas ha llevado a los Reyes hasta el monasterio de San Juan de la Peña (Jaca) donde han estado acompañados por el ministro de Cultura, José Manuel Rodríguez Uribes; el presidente de las Cortes de Aragón, Javier Sada; la delegada del Gobierno, Pilar Alegría; el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y el alcalde de Jaca, Juan Manuel Ramón. La visita a este singular enclave cargado de leyenda, cuna del Reino de Aragón y panteón real de los monarcas aragoneses, ha sido la primera que Felipe VI y doña Letizia realizan de manera oficial.
Junto a todas las autoridades, los Reyes han posado en los característicos arcos, representativos del Románico aragonés. Para esta cita, doña Letizia ha cambiado sus vestidos y conjuntos florales por unos pantalones negros culotte y una camiseta de manga corta en color claro. Aprovechando su paso por el monasterio, los Reyes han inaugurado un nuevo espacio dedicado al cenobio y al X conde de Aranda, Pedro Pablo Abarca de Bolea. El año pasado se cumplió el tercer centenario de su nacimiento y es una de las figuras más influyentes de la Historia de España. A su salida se encontraron con un grupo de niños que también iban a ver el Monasterio.
- La 'entrevista' de doña Letizia a una trabajadora de la huerta murciana
- Todas las anécdotas (con gesto romántico incluido) de la visita de los Reyes a Cuenca
De allí se han trasladado a Jaca, donde han sido recibidos por un buen número de ciudadanos que se agolpaban por las calles del centro para vitorearles y saludarles. Desde la plaza de la Catedral, don Felipe y doña Letizia han recorrido, la calle Mayor, la calle Echegaray y la plaza de San Pedro, donde han generado un gran revuelo a su paso y han protagonizado una cálida bienvenida.
Antes de poner el punto y final a su presencia por tierras oscenses, Felipe VI y su esposa se han acercado al Pabellón de Hielo donde han mantenido una reunión de trabajo con representantes políticos y han sido informados de la situación del sector turístico. A ese encuentro han acudido representantes de diferentes asociaciones de hostelería que les han explicado el plan de choque de Aragón para combatir la crisis generada por el COVID-19.
El turismo representa más de un 8% del PIB aragonés y es, si no el más importante, uno de los sectores más importantes para fijar población en el territorio, contribuyendo en la lucha contra la España vaciada. Es ahora cuando el turismo de interior tiene la oportunidad de ser el primero en recuperarse, dado que el comportamiento de los viajeros va a reforzar los destinos no masificados, de proximidad y de contacto con la naturaleza.
Los Reyes son grandes conocedores de Jaca y de los Pirineos pues han visitado la zona en muchas ocasiones de manera familiar y privada. Hay que recordar que don Felipe ha acudido en múltiples ocasiones a esquiar al Pirineo y que también estuvo en Jaca para formarse como militar. Unas escapadas familiares en las que también han estado acompañados por sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Así, por ejemplo, en el invierno de 2017 los cuatro subieron al Pirineo aragonés donde estuvieron comiendo en uno de los restaurantes de moda de Jaca y en el que degustaron un variado menú de huevos rotos, verduras salteadas, sopa castellana, canelones de boletus y parrillada de ternera y pollo. En ese viaje también aprovecharon para deslizarse por las pistas de Astún y se hospedaron en el hotel Villa de Anayet, en Canfranc.
La semana de don Felipe y doña Letizia finalizará este viernes en La Rioja y continuará la semana que viene con otros destinos españoles y con un homenaje, el 16 de julio, a las víctimas del coronavirus. Será el segundo tributo que los Reyes realicen a las víctimas del COVID-19 después de acudir este lunes, junto con sus hijas, a un funeral en la Catedral de La Almudena.