Don Juan Carlos y doña Sofía celebran este jueves su 58º aniversario de boda, que se celebró en Atenas, y de a que fueron testigos 143 miembros de 27 monarquías. Toda una vida juntos que este año tendrán que celebrar de manera muy diferente, sin la presencia física de ninguno de sus hijos ni de sus nietos, por las medidas de aislamiento sin precedentes decretadas por las autoridades sanitarias a raíz del coronavirus. En su caso, al igual que ha sucedido con otros monarcas como Isabel II o Carlos Gustavo de Suecia, evitar el contacto es primordial ya que los dos se encuentran en el grupo de riesgo por tener más de 80 años. Además, este también será un aniversario un tanto agridulce para el antiguo jefe del Estado después de que el pasado 15 de marzo, Felipe VI retirara a su padre la asignación pública que recibía y renunciarse a su herencia.
© GtresonlineA raíz de que el Gobierno fijara el estado de alarma, don Juan Carlos y doña Sofía no han sido vistos de manera oficial ni han tenido ninguna actividad institucional, a diferencia de su hijo y doña Letizia que han permanecido teletrabajando desde el Palacio de la Zarzuela y han hecho alguna visita. También sus nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, han reaparecido en medio del la cuarentena. La última imagen en público que se tiene de don Juan carlos se produjo el pasado 26 de febrero cuando acudió al estadio Santiago Bernabéu para ver el encuentro de ida de octavos de final de la Champios League que enfrentó al Real Madrid y al Manchester City. Sentado junto a Florentino Pérez, presidente del club blanco, el Rey presenció el partido sin presagiar que tan solo unas semanas después el país viviría un encierro sin precedentes y su hijo tomaría una drástica decisión.
© Gtresonline- Se cumplen dos años del desencuentro de doña Letizia y doña Sofía
- Don Juan Carlos visitó a la infanta Elena días antes de conocerse el comunicado de la Casa del Rey
Por el contrario, a doña Sofía se la vio de manera oficial a principios de marzo cuando la pandemia ya era un hecho en nuestro país y tan solo cinco días antes de que se suspendieran las clases para los escolares, el paso previo a que se decretara el confinamiento. Lo hizo participando de una tradición muy arraigada en la Familia Real: el besapiés al Cristo de Medinaceli. Debido a la situación sanitaria se impidió que los feligreses besaran la figura, algo que doña Sofía cumplió a rajatabla.
© GtresonlineEl 15 de marzo, solo un día después de que se estableciera el segundo estado de alarma de la historia de la democracia, la Casa Real emitió un comunicado en el que se informaba que el rey Juan Carlos dejaba de percibir su asignación pública y que don Felipe renunciaba “a la herencia que personalmente le pudiera corresponder, así como a cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonacia con la legalidad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada y que deben informa la actividad de la Corona”. Una nota que llegó después de las noticias publicadas en diferentes medios de comunicación, en las que se aseguraba que el rey Felipe aparecía como beneficiario de una fundación off shore llamada Lucum de la que la Casa Real explico que “no tenía conocimiento, participación o responsabilidad alguna en los presuntos hechos que mencionaba, ni designaría representante legal para iniciar negociación alguna con el citado despacho de abogados sobre los hechos descritos”.
© GtresonlineA pesar de no haber tenido agenda oficial por el coronavirus, la reina Sofía quiso tener un generoso gesto y la Fundación que lleva su nombre, y de la que es presidenta, entregó al Banco de Alimentos una donación para que se pudieran comprar 265.000 litros de leche que fueron destinados a los niños más vulnerables durante el brote vírico.
En este atípico aniversario de boda seguro que los reyes Juan Carlos y Sofía, a los que el confinamiento pilló en Madrid, recibirán muchas felicitaciones por viodellamda de amigos y familiares, entre ellas las de sus nietos que están muy pendientes de ellos durante toda la cuarentena. Además, el Rey continúa con sus revisiones médicas y cuidándose después de que el pasado agosto se sometiera a una operación coronaria.
