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Desde que el Gobierno decretó el estado de alarma el pasado 14 de marzo, los reyes Felipe y Letizia han permanecido en todo momento informados acerca de la situación y la evolución de la pandemia. Prácticamente todos los días se han puesto en contacto con diversos colectivos, asociaciones benéficas, entidades, empresas de diferentes sectores y representantes políticos para conocer de cerca tanto los avances que se están realizando para paliar la propagación del COVID-19 como la forma en la que este virus está afectando a los ciudadanos más vulnerables. La mayoría de 'reuniones' que han mantenido los Reyes se ha llevado a cabo mediante videoconferencia, haciendo uso de las nuevas tecnologías, aunque en algún caso estos encuentros se han producido físicamente o bien por teléfono.
En ¡HOLA!, los Reyes unen fuerzas en la batalla contra el coronavirus
© GtresonlinePara poder desempeñar correctamente su trabajo y que las videollamadas transcurran sin dejar nada al azar, don Felipe y doña Letizia recurren a un pequeño truco que les ayuda a identificar a la perfección a cada uno de sus interlocutores. Y es que en el despacho en el que se están llevando a cabo estas reuniones, sobre la mesa, el monarca y su esposa tienen a su disposición un amplio dossier en el que figura la imagen y el nombre de todos ellos, para poder dirigirse a ellos sin dar pie a ningún equívoco.
Hasta este martes el 'secreto' de los Reyes para que sus videoconferencias salgan perfectas había quedado completamente oculto. Ha sido precisamente una de ellas, la que mantenían con una representación del Consejo de Dirección de la Asociación Educativa de Ítaca, que combate la pobreza infantil y la exclusión social en la zona norte de L'Hospitalet (Barcelona), la que ha puesto al descubierto esta pequeña herramienta que facilita enormemente la labor de don Felipe y doña Letizia.
El director de la OMS informa directamente a los Reyes de la expansión del COVID-19
© GtresonlineLo cierto es que si uno repara en las fotografías de las distintas reuniones virtuales que han mantenido a lo largo de estos días, pueden vislumbrarse e intuirse documentos similares sobre su mesa. Así ocurrió, por ejemplo, el pasado 8 de abril, jornada en la que la Reina se preocupó por la situación de la mujer gitana, mientras que su marido aprovechó para enviar ánimos a las cofradías andaluzas. O un día después, cuando los Reyes transmitieron su apoyo al sector tecnológico, clave durante la cuarentena.
El rey Felipe reconoce la contribución de la seguridad privada a la lucha contra el virus
Antes incluso de los españoles se confinaran en sus casas, don Felipe y doña Letizia ya mostraron su preocupación por la crisis del coronavirus. De hecho, fueron de los primeros en someterse a las pruebas después de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, diera positivo. La razón no fue otra que el encuentro que mantuvo la política con la reina Letizia días antes. Finalmente, los resultados del test dieron negativo, es decir, que los Reyes no contrajeron la enfermedad, algo que sí les ocurrió a otros 'royals' europeos como Alberto de Mónaco o Carlos de Inglaterra.
