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Es el sexto año consecutivo que la princesa Leonor y la infanta Sofía asisten junto a sus padres al desfile de las Fuerzas Armadas con motivo de la Fiesta Nacional y nunca dejan de sorprenderse en los momentos más llamativos y espectaculares. Es habitual verlas haciéndose confidencias y mostrando su asombro y admiración ante las maniobras del Ejército del Aire y, aunque ha habido cosas que han cambiado, entre ellas el lugar que ocupa Leonor como heredera, la espontaneidad y la complicidad entre las hermanas sigue intacta.
Desde el año pasado, la Princesa de Asturias se sitúa a la derecha de su padre, como una muestra más de su creciente presencia en la vida pública, y luciendo en su vestido la insignia del Toisón de Oro que le impuso su padre a principios de 2018, mientras que la infanta Sofía se coloca junto a su madre. Aunque la distancia física les impide compartir comentarios entre ellas, las hermanas se entienden con la mirada y comparten el mismo entusiasmo que han mostrado siempre en este evento. Además, como de costumbre, don Felipe no deja de estar pendiente de su hija mayor, mientras que doña Letizia hace lo propio con la benjamina.
Las dos hermanas han llegado muy sonrientes y felices de presenciar un año más el desfile del Día de la Hispanidad. Sus padres siempre tratan de que entre ellas no haya demasiadas diferencias y, aunque el papel de la heredera siempre va a exigir distintos protocolos, una de las costumbres que conservan es lucir siempre modelos de corte similar en los que solo varían el color o algún detalle del diseño. En este caso, la princesa Leonor se ha decantado por un vestido corola corto rosa palo, haciendo juego con el de su madre, y la infanta Sofía uno similar, con el talle más alto, en azul. En cuanto al peinado, las dos han optado por lucir el pelo suelto con unas favorecedoras ondas que les da un aire muy juvenil.
En 2014 fue la primera vez que acudieron al desfile del Día de la Hispanidad, cuando los reyes Felipe y Letizia apenas llevaban cuatro meses de reinado y para ellas resultó toda una novedad. Ambas protagonizaron momentos divertidos y espontáneos, pero con los años se han vuelto unas veteranas y sus reacciones son más moderadas. En unas semanas el 31 de octubre la princesa Leonor cumplirá 14 años, mientras que su hermana pequeña cumplió 12 en abril. El creciente protagonismo en la vida institucional de la heredera, no supone ningún problema para la infanta Sofía, que siempre ha sido un gran apoyo. La siguiente cita será en los próximos Premios Princesa de Asturias, en los que debutará Leonor, como siempre bajo la mirada orgullosa y cómplice de su hermana.
Una vez concluido el desfile, en el que participan 3.500 efectivos, 76 aeronaves y más de 100 vehículos, los Reyes y sus hijas pondrán rumbo al Palacio Real donde tendrá lugar la tradicional recepción a la que asistirán numerosos representantes del mundo de la política, la sociedad y la cultura.
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