Leonor y Sofía cambian de imagen y se apuntan a la coleta

Como cada verano, don Felipe y doña Letizia disfrutan de sus vacaciones en Palma de Mallorca, el refugio estival de la Familia Real. Y, como viene siendo habitual en los últimos tiempos, los Reyes han cedido todo el protagonismo a sus dos hijas, Leonor y Sofía, que han llamado la atención con la nueva imagen que han lucido este domingo durante un paseo por Pollença, ¡con coleta!, un peinado nada habitual en ellas y con el que están muy guapas. Ambas se encuentran a las puertas de la adolescencia y su físico da buena muestra de ello. Tanto la princesa, que va a cumplir 14 años el próximo mes de octubre, como la infanta, que tiene 12 años, lucen una melena mucho más larga que antes, lisa.

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Las hermanas parecen haber dejado atrás el peinado de trenza-diadema que solían llevar y han tomado la decisión de llevarlo suelto o con coleta, como cualquier chica de su edad. Además, han crecido mucho. De hecho, ya están casi igual de altas que su madre, de quien parecen haber heredado su impecable estilo a la hora de vestir. El armario de las hijas de los Reyes se está transformando. Como muestra de ello, el look que han elegido para su visita al mercadillo de Pollença, donde han lucido las dos un mono idéntico de rayas blancas y marrones muy juvenil y estiloso. Además, su actitud en los puestos, en los que han mirado atentamente distintas prendas, deja claro que están empezando a interesarse por el mundo de la moda.

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Otra muestra evidente de su evolución es su zapatero. Para ir al cine el primer día que llegaron a la isla apostaron por zapatillas de deporte, el calzado más común entre las chicas de su edad. Además, en sus siguientes salidas en Palma, la princesa Leonor ha lucido las tradicionales abarcas que suelen llevar sus padres en esta época. Por su parte, la infanta ha sorprendido con unas alpargatas atadas al tobillo que son idénticas, aunque en otro color, a las que tiene su madre, doña Letizia.

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Poco a poco, Leonor y Sofía van siendo cada vez más independientes y toman ya sus propias decisiones. Algo a lo que, a buen seguro, les ha ayudado su experiencia en Estados Unidos, donde han asistido por segundo año consecutivo a un campamento en el que han hecho deporte y han practicado inglés, idioma que hablan y escriben a la perfección.