En las visitas de Estado, a veces el tiempo entre recepción y recepción se queda corto. Es lo que les ha pasado a los Reyes, don Felipe y doña Letizia, cuando han aterrizado en Córdoba, Argentina. La pareja real no ha tenido tiempo de cambiarse y han descendido del avión con el mismo look con el que han llegado a la cena que ha ofrecido el presidente Mauricio Macri y la Primera Dama, Juliana Awada. Pero las prisas no parecen haber hecho mella en los Reyes, quienes han llegado radiantes a su cita.