El Palacio Real de Madrid ha abierto sus puertas para recibir con todos los honores al presidente de Perú, Martín Vizcarra, y su mujer, Maribel Díaz, en una cena de gala ofrecida por los Reyes en su honor. Don Felipe y doña Letizia llegaban sonrientes y vestidos con sus mejores galas al Salón del Trono, donde han esperado unos segundos antes de dar una cariñosa bienvenida a sus invitados.
El Rey vestía de frac y lució el Collar de la Orden del Sol, la condecoración que le había concedido hace tres meses el Presidente de la República de Perú durante su visita de Estado al país iberoamericano. Doña Letizia sorprendía al rescatar para esta ocasión uno de sus grandes vestidos: el que llevó a la celebración previa a la boda de los Duques de Cambridge. Un diseño firmado por Felipe Varela de tul gris lavanda con bordados florales y escote palabra de honor que ha combinado con un precioso recogido, que dejaba ver en todo su esplendor los pendientes de brillantes que le regalaron por su boda los reyes Juan Carlos y Sofía y la diadema floral de Mellerio con la que se ha coronado por primera vez este año.
Se trata de una tiara que Franco regaló a doña Sofía con motivo de su boda con el entonces príncipe Juan Carlos. Lo curioso es que es una corona multiusos y se puede convertir en collar o en tres broches. De las siete diademas reales que ha heredado de la reina Sofía, doña Letizia ha optado por su favorita. Es la que ha lucido en más ocasiones, siendo Princesa de Asturias y ahora en calidad de Reina. Probablemente una de las razones que han pesado en la elección de su atuendo haya sido su especial tonalidad lavanda, que conjuntaba a la perfección con la banda de la Orden al Mérito por Servicios Distinguidos, que concede el Estado Peruano por los servicios prestados, de la que colgaba a su vez la Gran Cruz de la Orden del Sol.
Igualmente, el Presidente y la Primera Dama vestían la noche con sus mejores galas -un frac y un elegante vestido azul con superposición de encaje- y estrenaban el Collar de Isabel La Católica y la Gran Cruz, respectivamente, que el Rey acababa de concederles. Tras su encuentro y saludo, los anfitriones han recibido a los demás invitados –representantes de las instituciones del Estado, de los ámbitos empresarial, cultural y económico de ambos países- en el salón del histórico edificio con todo el ceremonial que un acto de este calibre indica.
Entre los invitados más destacados, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acompañado de su esposa, Begoña Gómez, muy elegante con un vestido de líneas sencillas en color negro y con detalles en dorado; la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que asistía en silla de ruedas tras su accidente hace unos meses; el escritor peruano, Mario Vargas Llosa, y su pareja, Isabel Preysler; la presidenta del congreso, Ana Pastor; el presidente del Senado, Pío García Escudero, o el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Josep Borrell.
La conexión entre la Reina y la Primera Dama peruana se ha hecho visible una vez más en esta cita. Los gestos de complicidad y amistad que se han producido en su posado para la prensa dejaban constancia de la buena relación que existe entre ellas tras varios encuentros juntas de aquellos días de visita a Perú de los Reyes en el pasado mes de noviembre.
Tras los saludos, los anfitriones y sus invitados se han trasladado al comedor de gala, un salón de 400 metros cuadrados inaugurado el 29 de noviembre de 1879 por los reyes Alfonso XII y María Cristina de Habsburgo y decorado con tapices de Bruselas portátiles, piezas de Sèvres y arañas de cristal, que con frecuencia se menciona entre los más bonitos de Europa, para iniciar la velada.
Durante los discursos, don Felipe subrayó que Perú cuenta “...siempre con el apoyo decidido de España. Y que no es una manifestación retórica. En el curso de esta Visita de Estado, nuestra cooperación bilateral se verá reforzada con la firma de un importante número de acuerdos en cuestiones muy diversas: desde la gestión de desastres naturales, a la cooperación en materia de patrimonio, pasando por la facilitación de la movilidad de nuestros ciudadanos más jóvenes...”. Tras los brindis, los Reyes y sus invitados compartieron un menú servido por Óscar Velasco, chef del restaurante Santceloni de Madrid, con dos estrellas Michelín y tres Soles de Repsol, mientras la Unidad de Música de la Guardia Real amenizaba la velada con piezas populares españolas y peruanas.
La visita a España del Presidente y la Primera Dama coincide con la 38ª edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo-ARCOmadrid, de la que Perú es país invitado. Una cita a la que acudirán mañana por la mañana con los Reyes en su acto inaugural. Tras ARCO, el mandatario mantendrá un encuentro con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en La Moncloa y por la noche se celebrará una recepción en El Pardo. El viernes, ya en visita privada, irá a la Casa de América, donde se reunirá con empresarios españoles, y al Espacio Fundación Telefónica, para contemplar la exposición fotográfica Nasca. Además irá al Consulado de Perú y descubrirá en el Parque del Oeste un busto de César Vallejo. Para finalizar ofrecerá una recepción en el Museo Reina Sofía.