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Asturias está viviendo su día con gran emoción. En una jornada histórica en la que se produce la triple efeméride del I Centenario de la Coronación de la Virgen de Covadonga, el XIII Centenario del Reino de Asturias y el Centenario de la creación del Parque Nacional de la montaña de Covadonga, la Familia Real ha querido sumarse con lo que, además, es la primera visita institucional de la princesa Leonor, princesa de Asturias.
No ha sido hasta pasadas las doce de la mañana cuando don Felipe, doña Letizia, la princesa Leonor y la infanta infanta Sofía han hecho acto de presencia entre vítores y aplausos en el Real Sitio de Covadonga, escenario de los actos centrales. En su primera parada se han encaminado a la Santa Cueva, donde tras inclinar la cabeza ante 'La Santina', escuchar a Hevia sonar su gaita y las palabras del arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, la princesa Leonor y la infanta Sofía han recibido dos medallas de la Virgen de Covadonga en oro dorado y oro blanco, que en su corona lleva unas piedras preciosas y en el reverso la cruz de la Victoria.
Unas joyas que las hijas de los Reyes se colocaban a los pocos minutos y que han lucido en su siguiente parada a la Basílica de Santa María la Real. Allí hemos podido ver a la perfección cada detalle de estas medallas, pues ha dado la casualidad (o no) que cada una de ellas lucía un reverso diferente. Mientras Leonor mostraba la Cruz de la Victoria -principal símbolo representativo del Principado de Asturias, al figurar tanto en su bandera como en su escudo-, Sofía lucía la Virgen en oro dorado y oro blanco.
Las joyas han sido las grandes protagonistas en el look de la princesa de Asturias, pues según avanzaban los actos, ha mostrado todos los presentes en su estilismo. De esta forma, tras recibir de manos de Javier Fernández Fernández, Presidente del Principado de Asturias, en un acto celebrado a puerta cerrada en la casa capitular de la basílica, Leonor lucía la insignia de Asturias, inspirada en la de Felipe VI, y realizada por la joyería Quirós. Lo hacía durante su baño de multitudes, el primero que tienen las hijas de Felipe y Letizia.
Un emblema centenario que su padre, el rey Felipe VI, también recibió el 1 de noviembre de 1977 cuando realizó su visita a Asturias. La pieza, realizada en oro de dieciocho quilates blanco y rosa, brillantes y zafiros , cuenta con la cruz de la victoria y está redondeada con una orla de oro blanco sobre la que figura la inscripción ‘Hoc signo tuetur pius – Hoc signo vincitur inimicus’ (Con este emblema se defiende al piadoso. Con este emblema se vence al enemigo). Sobre la Cruz de la Victoria figura la Corona Real. En su reverso, enmarcado en una orla, puede leerse ‘Leonor Princesa de Asturias’.
A la medalla y la insignia, se han sumado unos pendientes que, lejos de significado alguno más allá del personal, no es la primera vez que vemos en la primogéntia de Felipe VI. Tanto en su comunión como en la de su hermana, Leonor escogía estos discretos pendientes de brillantes.
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