Los Reyes y sus hijas inauguran el verano con el tradicional posado en el Palacio de Marivent

Un año más, el verano 'real' ha quedado inaugurado con el tradicional posado de don Felipe y doña Letizia en el Palacio de Marivent. Acompañados de sus hijas, la princesa Leonor, de 11 años, y la infanta Sofía, de 10, los Reyes han comenzado sus vacaciones en Palma de Mallorca con esta sesión de fotos que ha tenido lugar a hacia las 19:00 horas de la tarde de este lunes en su residencia estival. La expectación era máxima y, como siempre, este posado que suelen hacer todos los años por estas fechas ha sido analizado al detalle: cada gesto, cada mirada... Además, las pequeñas no habían posado ante una cámara desde el pasado mes de mayo, cuando vimos a toda la familia celebrando la Primera Comunión de la hija menor de los soberanos.

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Tal y como han hecho en los últimos tres años desde la proclamación como Rey de Felipe VI, los cuatro se han mostrado de lo más sonrientes, compartiendo gestos de cariño y complicidad. Todos vestidos en tonos azules y blancos (la nota de color la puso el detalle amarillo de la camiseta marinera de la reina Letizia), salieron por la puerta principal y se acercaron a saludar a los 70 periodistas que se congregaron en Marivent para cubrir el acto y con los que charlaron muy brevemente, tan solo para hablar del calor que hacía y desearles un feliz verano. Después, posaron en una de las escaleras laterales del Palacio regalándonos una foto de familia distinta a la de otros años.

En total, seis minutos de duración y tres escenarios distintos para posar en los que hemos podido ver lo mayores que están Leonor y Sofía, y lo bien que se desenvuelven con los medios en este tipo de actos, además de la actitud siempre cariñosa que muestran con sus padres.

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Este es uno de los actos habituales de los Reyes durante la estancia estival en Mallorca, junto con la recepción a representantes de la sociedad civil de Baleares, programada para el viernes, 4 de agosto, y las audiencias de don Felipe con las autoridades del archipiélago, celebradas el pasado viernes. El jefe del Estado acudió al Real Club Náutico de Palma (RCNP), donde este lunes ha dado comienzo la 36º edición de la Copa del Rey de Vela, en la que va a participar a bordo del velero Aifos. 

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Junto al resto de la tripulación, don Felipe salió el pasado domingo a navegar en el barco, propiedad de la Armada, durante la última jornada de entrenamientos. Su intención es competir varios días en la Copa, que se prolongará hasta el próximo sábado, después de que el pasado año solo lo hiciera una jornada debido a la compleja situación política por la falta de Gobierno. Además de los entrenamientos, el Rey tuvo tiempo para relajarse en un ambiente más familiar volviendo a disfrutar de uno de sus deportes favoritos de verano: navegar. Y salió a la mar en un yate acompañado de su madre, la reina Sofía, y su sobrino mayor, Felipe de Marichalar.

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