Hasta el último momento ha sido una incógnita, sin embargo, en las últimas horas todo apuntaba ya a que el esperado encuentro entre la reina Letizia y la Duquesa de Cambridge iba a tener lugar por todo lo alto: en el banquete de Estado que la Reina de Inglaterra ha brindado en honor a los Reyes.
La Reina de Inglaterra ha recibido a los Reyes en el Salón de la Música, allí se han hecho la fotografía de familia y... ¡sorpresa! Gracias a una puerta abierta hemos podido ver el esperado encuentro entre doña Letizia y la Duquesa de Cambridge, que charlaba al fondo con el Príncipe Harry, que asistía esta noche por primera vez a un banquete de Estado.
De no ser por esa puerta este encuentro no habría quedado reflejado en las cámaras pues, tal y como dicta el protocolo, el cortejo real estaba encabezado por la Reina de Inglaterra y el rey Felipe, seguidos de doña Letizia y el Duque de Edimburgo, quedando la Duquesa de Cambridge cuatro posiciones por detrás de la Reina. Una vez en el Gran Salón de Baile, el principe Guillermo y Kate se han sentado en los extremos de la mesa presidencial, mientras que doña Letizia ha ocupado el lugar que le corresponde entre el Duque de Edimburgo y el Príncipe de Gales.
La experiencia de doña Letizia –con numerosos banquetes de Estado y cenas de gala a sus espaldas- y la Duquesa de Cambridge, para la que este es su segundo banquete de Estado, se han sentado a la mesa en el Palacio de Buckingham. Hay que recordar que la Reina, siendo de Princesa de Asturias, estuvo presente en la Abadía de Westminster, cuando se celebró la boda de los Duques de Cambridge.
Aunque la Reina “esconde” bajo la manga varios ases en forma de tiaras “sin estrenar” para el Palacio de Buckingham ha apostado de nuevo por la Tiara de Lis, con el emblema de los Borbones, que lució por primera vez durante la cena de gala en honor al Presidente de Argentina en el Palacio Real el pasado febrero. Mientras la Duquesa de Cambridge lució un collar de diamantes y rubies que la Reina recibió de sus padres como regalo con ocasión de su boda y ha vuelto a apostar por la que fuera la tiara favorita de la princesa Diana: la diadema conocida Lover´s Knot o Nudo de los amantes. Esta joya fue creada en 1914 por encargó de la reina María, esposa del rey Jorge V, y tiene un diseño neoclásico realizado en diamantes talla brillante y en sus inicios (tal y como se puede ver en algunos óleos de la reina Mary) contaba con dos filas de perlas, una superior y otra inferior en forma de gota. La Princesa de Gales, que usó este aderezo en numerosas ocasiones y en citas históricas.