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Después del intento a Arabia Saudi, fallido por los motivos más tristes (hubo de aplazarse tras la muerte del hermano del Rey saudí), ahora sí (25 días después de la formación del nuevo Gobierno) los reyes Felipe y Letizia retoman su agenda exterior con un viaje de Estado de tres días a Portugal, que servirá para escenificar la excelente salud de la que gozan las relaciones bilaterales y para favorecer el impulso de dossieres pendientes de avances.
Dos años después del breve viaje de presentación que realizaron en el día al país vecino tras la proclamación de Felipe VI como Rey de España, regresan a Portugal para una estancia más larga que les llevará a varias ciudades lusas, empezando por Oporto y continuando por Guimaraes y Lisboa. Un viaje al que las autoridades portuguesas dan la máxima importancia, no en vano ambos países son socios estrechos, comparten múltiples intereses comunes por su condición de socios en la UE y en la comunidad iberoamericana, además de que con frecuencia tienen visiones coincidentes en asuntos multilaterales.
Tras una ceremonia de despedida con honores celebrada en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, los Reyes han emprendido su viaje a Oporto, acompañados del Ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis, que se estrena en el cargo con un ambicioso programa oficial en la primera visita de Estado de los soberanos con el nuevo Gobierno. Don Felipe vestía abrigo oscuro con traje y doña Letizia llevaba el mismo abrigo rosa palo con flores 3D de Felipe Varela que estrenó en la Boda Real de Guillermo y Stéphanie de Luxemburgo y el mismo traje ciruela que llevó aquel día. Esta vez, lucía un fular para resguardarse de las frías temperaturas de Madrid y unos nuevos pendientes de perlas grises como complementos protagonistas.
Allí les ha recibido el Presidente de Portugal, Marcelo Rebelo. La visita ha arrancado en el Ayuntamiento de Oporto, donde el Rey mantendrá una primera reunión con el Presidente portugués, mientras la Reina se reunirá con representantes de la Liga Portuguesa contra el Cáncer. En el Ayuntamiento, donde don Felipe recibirá la Llave de la Ciudad, pronunciará su primer discurso. Pondrá el broche de oro a su primera jornada una cena en su honor en el Paço dos Duques de Bragança en la que se espera la presencia de numerosas celebridades, apuntan algunos medios de comunicación los nombres de Iker Casillas y Sara Carbonero, viejos conocidos de los Reyes, que fueron los primeros en aplaudir su beso con Sara en el Mundial.
Durante su visita a Portugal, que se prolongará hasta el miércoles, Felipe VI pronunciará un total de seis discursos. El de mayor relevancia lo ofrecerá el miércoles en su intervención en una sesión de la Asamblea portuguesa, una deferencia que Portugal tiene con los Jefes de Estado de los socios que considera más cercanos. Y España es cercano entre los cercanos, dicen fuentes diplomáticas. La agenda de los Reyes incluye una visita a una exposición sobre el artista catalán Joan Miró, uno de los máximos representantes del surrealismo, así como recorridos por centros punteros de investigación científica portugueses, como el Parque de Ciencia y Tecnología de la Universidad de Oporto, el Instituto de Investigación e Innovación en Salud o la Fundación Champalinaud de investigación contra el cáncer.
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