Roma, Milán... Y ahora en París la reina Letizia continúa su labor como Embajadora de la FAO
La Reina ha regresado a la capital francesa para asistir a la apertura de la II Conferencia Global sobre Salud y Cambio Climático, donde ha instado a la lucha contra el cambio climático para mejorar la salud
Roma, Milán... y ahora París. La reina Letizia vuelve a defender su causa de largo recorrido como Embajadora de la FAO para la Nutrición ante la comunidad internacional instando en esta ocasión a la lucha contra el cambio climático, un instrumento básico en la mejora de la salud global, sobre todo para garantizar una mejor nutrición en todo el mundo. La Reina ha participado en la inauguración de la II Conferencia Global sobre Salud y Cambio Climático en su quinta visita a la capital francesa con un discurso incisivo en el que lanzó a los presentes una serie de preguntas que determinarán el futuro.
“Yo, como embajadora de la FAO para la Nutrición, me planteo y les planteo algunas preguntas… ¿Hemos llegado al límite del planeta? ¿Deberíamos modificar nuestros sistemas alimentarios? ¿Debemos cambiar nuestros sistemas energéticos? (…) ¿Es nuestra mentalidad lo que debemos cambiar, el modo en que nos relacionamos con la naturaleza?”. Y concluyó que “la lucha contra el cambio climático podría estar en las respuestas a todas esas cuestiones”.
Tras recordar que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 97 por ciento del gasto sanitario mundial se destina a curar enfermedades y que solo el 3 por ciento se aplica a la prevención, doña Letizia insistió, en una intervención en perfecto inglés, que el progreso económico, social y tecnológico debe estar en “armonía con la naturaleza” porque “somos lo que comemos, lo que bebemos y lo que respiramos”.
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“El mayor desafío que tenemos es cómo alimentar a las 9.000 millones de personas que seremos en poco tiempo y conseguir su buen estado nutricional, que no es lo mismo que quitar el hambre, teniendo en cuenta que el clima está cambiando y que somos responsables de ese cambio”, sentenció en su única conferencia de este foro de dos días, organizado por la Organización Mundial de la Salud y el Gobierno de Francia, para abordar la implementación del Acuerdo de París del pasado 15 de diciembre, a fin de establecer una agenda de medidas para construir sociedades más saludables y sostenibles.
Doña Letizia continúa recorriendo mundo como Embajadora especial de la FAO, cargo que la ha llevado desde su nombramiento en junio de 2015 a distintos foros en Italia y ahora a Francia, país vecino y muy querido, donde se ha referido a la salud “como derecho humano”: “Nadie está a salvo ni es ajeno. Nadie. Y todos, los que vengan detrás también, merecemos gozar de salud. Los más de 800 millones de seres que pasan hambre y los 2.000 millones afectados por sobrepeso y obesidad, y las enfermedades derivadas de ello, por ingerir alimentos en exceso. Todos debemos sentirnos concernidos por un problema que parece que se nos escapa de las manos, pero que está, como nunca antes, en esas mismas manos. En las nuestras”.
Palabras tan escogidas como su conjunto de firma francesa (top azul de la maison Nina Ricci), un guiño al país anfitrión. Correspondió la Ministra de Ecología, Desarrollo sostenible y Energía, Segolene Royal, con un almuerzo en el Ministerio de Ecología en honor a la Reina. A su término, pondrá de nuevo rumbo a Madrid, donde mañana presidirá la entrega de los premios que llevan su nombre, otorgados por el Real Patronato sobre Discapacidad, en el Palacio Real de El Pardo.