Los restos mortales de don Carlos de Borbón-Dos Sicilias, primo del don Juan Carlos e Infante de España por expreso deseo del Rey emérito, han llegado este miércoles por la mañana al Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, donde ha quedado instalada la capilla ardiente hasta las 18:00 horas. La decisión de que sea éste el lugar en el que descansen los restos del Duque de Calabria ha sido tomada "de acuerdo con la familia y por deseo de Su Majestad el Rey", tal y como explicó en un comunicado el heredero del título y único hijo varón del Infante, Pedro de Borbón-Dos Sicilias, que se encontraba esta mañana en el Monasterio esperando la llegada del féretro.
Tras bajar del coche, Pedro de Borbón-Dos Sicilias ha saludado una por una a las personalidades allí reunidas, para a continuación esperar de pie la llegada de los restos mortales del Infante. A su lado se encontraba Pedro López-Quesada y Fernández-Urrutia, marido de Cristina de Borbón-Dos Sicilias (la mayor de las hijas del fallecido). Aguardaban junto a ellos el jefe del Cuarto Militar de la Casa del Rey, almirante Juan Ruiz Casas; el arzobispo castrense, Juan del Río; el prior del monasterio, Modesto García Grimaldos, y la gerente de Patrimonio Nacional, Alicia Pastor Mor.
Poco después llegaban las hijas del Duque de Calabria: Cristina de Borbón-Dos Sicilias, acompañada por su hija Victoria, que se ha reunido con su marido tras saludarse cariñosamente; Victoria de Borbón-Dos Sicilias, la menor de las hermanas, junto a su marido el griego Markos Nomikos; María Paloma de Borbón-Dos Sicilias, con su esposo el archiduque Simeón de Austria, e Inés de Borbón-Dos Sicilias, así como la viuda del Infante, la princesa Ana de Orleans, hija del Conde de París, a quien todos han querido mostrar su apoyo.
El féretro, cubierto por la bandera nacional, ha sido portado a hombros por diez soldados de un piquete de la Guardia Real que le ha rendido honores y ha interpretado el himno nacional. Seguidamente se han adentrado en el Patio de Reyes, donde se había instalado un guión con el escudo de la Casa del Rey. Dentro del patio, los frailes agustinos del monasterio han precedido el cortejo que ha llegado hasta la llamada iglesia Vieja del recinto, donde se ha rezado una oración y ha quedado instalada la capilla ardiente.
Los Reyes Felipe y Letizia y Juan Carlos y Sofía han enviando sendas coronas de flores, una con los colores de la bandera nacional y la otra blanca con una cinta azul. Pasadas las 16:00 horas, don Juan Carlos y doña Sofía, acompañados de la infanta Elena llegaban al Monasterio de El Escorial para velar los restos mortales del infante Carlos de Borbón-Dos Sicilias. A su llegada al templo fueron recibidos por el hijo del Infante.
Entre las prsonalidades que han visitado la capilla ardiente se encontraban Luis Alfonso de Borbón; Simeón de Bulgaria, acompañado por su esposa, y otros amigos del fallecido como el empresario Juan Abelló y su mujer Ana Gamazo o Pepe Barroso y Mónica Silva.
El jueves tendrá lugar el entierro del Infante en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, tal y como anunció el Heredero en un comunicado, explicando que se celebrará una misa corpore insepulto “de carácter estrictamente familiar” antes de recibir sepultura.
A la espera del entierro, sus seres queridos se despidieron de don Carlos de Borbón-Dos Sicilias este martes en una misa privada que tuvo lugar en la finca de la que era dueño. A lo largo de la tarde fueron llegando a esta propiedad familiares y amigos del Infante, incluyendo otra de sus hijas, Victoria de Borbón-Dos Sicilias, que entró en coche con el rostro serio y triste.
-Carlos de Borbón-Dos Sicilias, único Infante de España por expreso deseo del rey Juan Carlos
-Pedro de Borbón-Dos Sicilias, el próximo Duque de Calabria y Conde de Caserta
-Carlos de Borbón-Dos Sicilias será enterrado en el monasterio de El Escorial
El infante Carlos de Borbón-Dos Sicilias falleció a los 77 años durante la mañana de este lunes, 5 de octubre, en su finca La Toledana, ubicada en Retuerta de Bullaque, en la provincia de Ciudad Real, tras varios años con un delicado estado de salud desde que sufrió un ictus en noviembre de 2012. Además de su primo, fue un gran amigo para don Juan Carlos, y este jueves será despedido de forma íntima pero con los honores propios de quien ha sido casi como un hermano para el Rey.