Fue el 31 de octubre de 2005 cuando, a las cinco y media de la madrugada don Felipe de Borbón, se reunió con los medios para confirmar el feliz nacimiento de su primogénita,la infanta Leonor. El nombre, según confirmó el Príncipe de Asturias, era uno de sus favoritos, no sólo por el nombre en sí, y su sonoridad, sino por las reminiscencias históricas. La elección de este nombre nos abre las puertas al fascinante mundo de la historia, una historia "real", donde las "Leonores" se muestran como mujeres de "rompe y rasga". Se dice que las mujeres con este nombre son activas, con fuerte personalidad y muy intuitivas, además de con cualidades para organizar y dirigir. Puntos muy a favor de una futura reina.
Leonor es nombre de raíz griega (“luz”), como griego es el de su abuela, la reina Sofía (“sabiduría”), el de su tía, la infanta Elena (“antorcha”), y el de su propio padre, el príncipe Felipe (“amante de los caballos”). Frente a tanto nombre de etimología griega, la Familia Real española también escoge otros de raíz latina: Juan, primer nombre del Rey, significa “lleno de gracia”; la infanta Cristina simboliza a “la que sigue a Cristo”; y la propia Princesa de Asturias, doña Letizia (eso sí, sin tener en cuenta la grafía en “z” o “c”) posee nombre que significa “felicidad”. Sin embargo, y en honor a Leonor, que cuando don Felipe sea proclamado Rey, tal y como establece la Constitución, pasará a ser la Heredera del Trono de España y la XXXVI Princesa de Asturias, conozcamos con mayor profundidad el origen de este nombre, así como sus profundas raíces históricas analizando a las “Leonores” más señaladas de todos los tiempos.
Leonor procede de Ilianor (“la que lleva el sol”), en honor a Ilios o Helios, el dios griego del sol. La terminación –or es de origen indoeuropeo y siempre remite “al agente que acomete o lleva a cabo algo”. Así, Leonor, se convierte en portadora de ese sol, esa luz, que ilumina a su paso. Otros dicen que tiene origen árabe y significa “Dios es mi luz y hay también quien habla de etimología latina, del grupo Luna-Elena.
Independientemente de sus raíces etimológicas, Leonor ha sido nombre de distintas reinas europeas, entre ellas, la de doña Leonor de Aquitania, la madre de Ricardo Corazón de León y Juan sin Tierra, una mujer libre, rompedora y osada con un alto nivel cultural. Leonor de Aquitania, entre los ocho hijos que tuvo con el conde de Anjou (luego, Enrique II, rey de Inglaterra), dio a luz una niña, Leonor. A los diez años fue comprometida con Alfonso de Castilla. A los once años la enviaron a España. A los quince años se casa, enamorada, con Alfonso de Castilla. Su labor en la corte castellana, aún se recuerda por su generosidad y por su preocupación por el pueblo. Pidió a su marido que se construyeran asilos y hospitales para los más necesitados. Su marido, Alfonso VIII, vive la famosa batalla de las Navas de Tolosa y la propia doña Leonor se desplaza hasta el mismo campo de batalla para estar a su lado. El matrimonio tiene cinco hijas, una de ellas de nombre Leonor. Y una bisnieta del mismo nombre que se casó en Las Huelgas con un rey inglés (Eduardo I).
En 1420 nació Leonor, Reina de Navarra, hija de Juan II de Aragón y de Blanca de Navarra. En 1479, a la muerte de su padre, Juan II, fue coronada reina con el apoyo de Fernando El Católico. Sin embargo, sólo vivió un mes como reina. Un reinado efímero para la última reina Leonor de España. Pero hay muchas más Leonor con el título de reina o princesa: Leonor de Alburquerque (1374-1435), reina de Aragón, sobrina de Enrique II de Castilla, y esposa de Fernando de Antequera, con quien compartió el reino de Aragón (1412); Leonor de Castilla (1310-1359), reina de Aragón. Murió asesinada por orden de Pedro El Cruel, por favorecer a Enrique de Trastámara; y Leonor de Aragón (1358-1382), reina de Castilla, entre 1379 y 1382.
Y en nuestro país vecino, Portugal, también varias Leonor (como Leonor de Austria, o Leonor Téllez de Meneses) ostentaron la Corona lusitana. No podemos olvidar tampoco, en este somero repaso, a Leonor de Habsburgo, la primera hija de Juana La Loca y Felipe El Hermoso, hermana, por tanto, de Carlos I de España y V de Alemania. Se casó con el rey de Francia, Francisco I y reinó más allá de nuestras fronteras.