Hoy se cumplen ocho años de la emotiva Boda Real de los Príncipes de Asturias, que tuvo lugar en la Catedral de La Almudena, en Madrid, y don Felipe y doña Letizia han comenzado su octavo aniversario de boda trabajando. Para conmemorar esta significativa fecha no tienen prevista ninguna celebración oficial, pero probablemente lo festejen en familia cuando regresen de su viaje a Málaga, donde esta mañana han visitado un proyecto de formación de Cáritas para jóvenes vulnerables, financiado por la Fundación Hesperia.
Don Felipe y doña Letizia llegaron al campus muy sonrientes y pudieron ver de primera mano dónde aprenderán estos jóvenes una nueva profesión, que les abrirá un nuevo futuro. Además de referirse al citado proyecto, el príncipe Felipe hizo especial mención a su aniversario, asegurando que "es un día muy especial" tanto para él como para su esposa. Asimismo, el príncipe ha subrayado: "Asumimos juntos, aquel 22 de mayo de 2004, un compromiso personal e institucional. A partir de ese momento, la princesa se unió al deber, ahora compartido, de trabajar con ilusión y entrega al servicio de los españoles".
El proyecto que han ido a visitar es un programa de inserción laboral para diez jóvenes con dificultades de integración social llamado 'Pre-taller de auxiliar de mecánica de vehículos ligeros', del Centro de Formación Profesional Ocupacional Sagrada Familia. Está desarrollado por Cáritas Diocesana de Málaga y puesto en marcha gracias a la herencia que dejó a don Felipe y doña Letizia el empresario Juan Ignacio Balada Llabrés, al que no conocían. Dicho empresario, fallecido en noviembre de 2009, nombró herederos de la mitad de su patrimonio, a partes iguales, a los Príncipes y a los ocho nietos de los Reyes, y legó la otra mitad a don Felipe y doña Letizia con el encargo expreso de que crearan con esta cantidad una fundación de interés social. Así, los Príncipes promovieron la constitución de la Fundación Hesperia en 2010 y el resto de herencia, la cantidad que recibieron personalmente, fue a parar a la Fundación para Personas Discapacitadas de la Isla de Menorca (FPDIM).
Los Príncipes todavía no habían visitado este proyecto, uno de cuatro llevados a cabo gracias a la herencia de Balada, y hoy han podido conocer de primera mano cuál es el trabajo desarrollado por Confederación Cáritas en el campo del empleo de inserción, que viene siendo en los últimos cinco años uno de los ejes prioritarios de la respuesta de Cáritas a los efectos sociales de la crisis. "Hemos querido compartir una parte de este día con gente que vive en una situación difícil y vulnerable", decía el príncipe Felipe durante su discurso.
La última aparición de los príncipes de Asturias antes de su aniversario fue ayer, durante el homenaje al artista catalán Antoni Tàpies, fallecido el pasado 6 de febrero, que presidieron ayer en Barcelona y al que asistieron más de cuatrocientas personas. Para la ocasión, doña Letizia lució un vestido negro por encima de la rodilla, con una americana también negra y zapatos color nude.