La Infanta Elena ha puesto el broche de oro a los actos que la Familia Real ha organizado en los últimos meses para conmemorar el centenario del nacimiento de su abuela paterna, doña María de las Mercedes. Con la mejor de sus sonrisas y luciendo un 'look' de lo más juvenil, doña Elena visitó la Real Academia de la Historia de Madrid para presidir el homenaje que se rindió a la figura de la Princesa de las Dos Sicilias y Condesa de Barcelona.
La hija mayor de los Reyes recibió con orgullo y emoción el primer ejemplar del libro Doña María. 100 años, una obra conmemorativa que recorre toda la vida de la madre de don Juan Carlos y recoge las impresiones de numerosas personalidades que tuvieron el honor de mantener una estrecha relación con ella, como es el caso de la Duquesa de Alba, el cardenal arzobispo Carlos Amigo Vallejo, el torero Curro Romero, el escritor y periodista Luis María Ansón, o el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, entre otros.
Elena, que además ostenta la Presidencia de Honor de la Fundación, lució una llamativa chaqueta de angora de color rosa que combinó con una camisa de raso y pantalones grises. Además, como fiel seguidora de las tendencias, la Infanta lució una pulsera 'decenario' de color morado que tuvieron tanta popularidad durante el pasado Mundial de Sudáfrica.
A su llegada al acto, Doña Elena recibió el aplauso de todos los asistentes entre los que se encontraban el director de la Real Academia de la Historia, Gonzalo Anés, el escritor Javier González de la Vega, biógrafo de Doña María de las Mercedes, que confesó que la obra descubre aspectos desconocidos de la vida de la madre del Rey, y el presidente de la Fundación, Santiago Herrero.
El libro pretende "legar a las generaciones venideras el ejemplo de amor a España que siempre ofreció Doña María" y, aunque se han editado 500 ejemplares, no saldrán a la venta. De hecho, su número cero fue entregado al rey Juan Carlos al concluir la ceremonia religiosa celebrada el pasado 23 de diciembre en la Capilla del Palacio Real de Madrid, a la que acudieron todos los miembros de la Familia Real española.