Las vistosas imágenes que ha protagonizado la familia real danesa en su visita a las islas Feroe

Todos ellos llegaban el pasado viernes a la capital, Tórshavn, a bordo del Yate Real Dannebrog, que utiliza la Familia Real danesa en sus ocasiones más especiales. A su llegada, sorprendía la llamativa vestimenta de todos sus miembros, que lucían para la ocasión el traje típico de las islas Feroe. 

Federico y Mary de Dinamarca han viajado en compañía de sus cuatro hijos, Christian, Isabella y los mellizos Vincent y Josephine, a las islas Feroe. Un viaje de cuatro días en el que hemos podido ver a la familia de lo más natural.

También descubrieron la ciudad de Klaksvík, en la isla de Bordoy, además del pueblo de Hattarvík, en Fugloy. Zonas de lo más desconocidas para gran parte del mundo que el futuro heredero y su familia han querido promocionar. Las islas Feroe son un archipiélago autónomo situado en el Atlántico Norte que forma parte del Reino de Dinamarca. 

A pesar de que han sido cuatro días cargados de actividades, esta ha sido una excelente oportunidad para que la familia al completo disfrutase de nuevas experiencias conociendo nuevos lugares.

Federico y los mellizos lucían el 'sjóstúka', compuesto por un sombrero, camisa, chaleco con bordado de flores, un patrón o llanura abierta, pantalones cortos de lana, medias de lana hasta las rodillas y ligas tradicionalmente hechas en los colores de la bandera de dichas islas.

Ellas, por su parte, vestían el 'stakkur', que consiste en una camisa de punto, un frontal de terciopelo bordado, bufanda y delantal, falda tejida, cinturón en terciopelo y una capa con un broche forrada de seda negra, el color más tradicional.

Esta ocasión también ha servido para comprobar que Christian, de 13 años, se está convirtiendo en un perfecto heredero al trono. Segundo en la línea de sucesión al trono, después de su padre, se mostró feliz y entusiasmado en todos los actos. 

En la apretada agenda que vivieron los príncipes herederos y sus hijos, pudimos ver como los pequeños disfrutaban y se divertían observando la fauna de la zona. Josephine, que llegó a mostrar su sueño en una de las numerosos citas, mostraba su asombro al ver a los peces. 

Con una ropa de lo más informal pero adecuada para una jornada de montaña, Federico y Mary vistieron a juego con sus hijos y optaron por una vestimenta en colores verdes para su jornada en Mikladalur. 

Divertidos y cariñosos, los pequeños también tuvieron tiempo para mostrarse naturales y dejar instantáneas de lo más bonitas. 

La familia al completo posaba frente al punto turístico más destacado de la aldea, la 'mujer foca'. Una escultura que hace referencia a una figura mitológica que podía cambiar su aspecto de animal por el de una bella mujer. 

El heredero y su mujer también posaron a solas en este entorno único y espectacular.