A su llegada a Japón, los Herederos de Dinamarca fueron recibidos por el príncipe Hedero Naruhito y su mujer la princesa Masako. Ambos tienen abierto en su país un debate sobre el relevo al trono.
En el caso de Dinamarca han sido las informaciones sobre el estado de salud del príncipe Henrik, unidas a que Federico cumplirá en 2018 los 50 años, lo que ha hecho que en las últimas semanas los medios de comunicación daneses hayan devuelto a la actualidad la posible abdicación de la reina Margarita; un asunto que no se había vuelto a tratar desde que la pasada primavera una cena de la soberana con el Consejo de Estado desatara los rumores de abdicación. Entonces las especulaciones perdieron fuerza en cuestión de horas ya que la Casa Real aclaró que no se estaba barajando un relevo en la Corona.
El caso de Japón es distinto, ya que fue el propio emperador Akihito –de 83 años- el que mostró su deseo de abdicar, un debate aún más complejo debido a la legislación y tradiciones que rigen a la dinastía más antigua del planeta. Desde entonces el Imperio y el Gobierno –que llevó al Parlamento una ley de abdicación, ya que hasta ahora la Constitución no contemplaba esa opción- se preparan para un hecho histórico y la apertura de una nueva Era con Naruhito y Masako al frente del Trono del Crisantemo.