La Familia Real de Dinamarca demuestra que más es mucho más en la solemne recepción de Año Nuevo

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La reina Margarita dio la bienvenida a 2017 con sus mejores galas, su vestido azul de seda salvaje, la tiara Orange Nassau de oro, perlas y diamantes y su estola de piel, fiel a la cita de Año Nuevo

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Los Príncipes herederos lucieron el collar de la Orden del Elefante, la máxima distinción que concede el país

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La esposa del Príncipe heredero vistió de oro la ocasión con un elegante vestido del diseñador Jesper Hovring, que combinó con una capa de color amaranto, la prenda que reina en la Cortes Reales, y con un clutch de Judith Leiber

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La princesa Mary llegó a palacio del brazo de su marido, Federico de Dinamarca, vestido con el tradicional uniforme militar danés, engalanado con todas las órdenes y con el sombrero de pluma negro

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Los príncipes Federico y Mary, a su llegada al palacio de Amalienborg

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La princesa Marie combinó su vestido con unos peep-toes de Zara

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La princesa Marie optó por un vestido con toque flamenco: entallado a la silueta y adornado con unos volantes a un lado

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La princesa Marie brilló con un vestido de libra metalizado de la firma danesa Ole Yde y los destellos de su tiara floral de diamantes

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La Guardia Real en palacio

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El príncipe Henrik anunció el año pasado que dejaría de ejercer sus obligaciones oficiales como consorte de la soberana para retirarse a un segundo plano, pero no será la solemne recepción de Año Nuevo la que de contar con su presencia, como siempre de frac y distinguido con las órdenes del reino

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Y como para la realeza una gala no es suficiente para celebrar el Año Nuevo, la reina Margarita de Dinamarca, acompañada del príncipe heredero Federico y de su esposa, la princesa Mary, celebró otra con igual esplendor días después en el palacio de Christiansborg, donde recibió al cuerpo diplomático con motivo del nuevo año