El príncipe Henrik hizo gala de su original y desenfadada forma de vestir hace unos días cuando participó en una de las tradicionales Cacerías Reales que se desarrollan en el bosque Grib
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El Príncipe demostró que, al igual que su esposa la Reina, no es amigo de convencionalismos en lo que a las modas se refiere
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Al término de la montería, como es tradicional, se exhibieron los trofeos de caza en el patio del palacio, momento al que también se unieron la soberana y el príncipe Federico
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La Familia Real danesa se convierte año tras año en anfitriona de un amplio número de cazadores que disfrutan de una magnífica y distendida jornada de caza al norte de Copenhague
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El príncipe Federico, al igual que su padre y otros cazadores, se decantó por unos originales pantalones de camuflaje