La Casa Real danesa acaba de difundir la primera imagen del príncipe Christian desde África, a donde se fue a primeros de septiembre para trabajar durante tres meses en una granja. Se trata de una experiencia que está viviendo dentro del año sabático en el que se encuentra tras graduarse en el colegio de secundaria. Además, esta nueva foto, que incluye cambio de look también ha servido para conmemorar su 19 cumpleaños que se celebra este martes.
Con un espectacular atardecer, con el río a sus espaldas, el príncipe Cristian posa ante la cámara con una gran sonrisa. Aparece vestido con una camisa en color claro, un sombrero al cuello, muy necesario para soportar los rigores del clima africano y unas gafas de sol colgadas. Seguro que acostumbrarse a la nueva climatología habrá sido todo un proceso, pues en Dinamarca las lluvias y el frío ya han hecho acto de presencia y es posible que en pocas semanas comience a nevar.
También ha llamado la atención el corte de pelo al que se ha sometido el hijo mayor de los reyes Federico y Mary. El heredero al trono ha dicho adiós a su peinado con raya al medio que lleva desde que era prácticamente un niño y aparece casi rapado. Quizá buscando la comodidad y aliviar las altas temperaturas. Un cambio de imagen que ha sido de lo más comentado en Dinamarca, donde ha causado un gran revuelo, según informa la revista Billed Bladet.
El pasado 4 de septiembre, Christian de Dinamarca hizo las maletas y puso rumbo a África oriental. Allí está desempeñando labores propias de un granjero y participa en el funcionamiento diario de dos explotaciones agropecuarias, lo que implica tareas prácticas y administrativas. La Casa Real considera que esta vivencia le proporcionará una gran visión sobre la naturaleza local. Está previsto que regrese a su país natal en diciembre.
En la Familia Real danesa existe una larga tradición de que los futuros monarcas hagan estancias prologadas en el extranjero durante su juventud y tengan la oportunidad de desarrollarse y conocer el mundo. En 1986, el rey Federico participó en una expedición a Mongolia centrada en los nómadas y en 1989 trabajó durante un año en una finca vitivinícola en California. La reina Margarita, abuela de Christian, también emprendió importantes viajes a América del Sur y del Este en la década de los años 1960.
Su tío también quiso ser granjero
Los príncipes daneses han tenido muchas experiencias en el mundo agrícola en algún momento. Su padre estuvo en California en un viñedo y su tío, el príncipe Joaquín, estudió economía agrícola con el objetivo de asumir el control de Schackenborg, donde residía cuando vivía en Dinamarca, administrar sus posesiones agrícolas, recoger grano y cultivar abetos. Comenzó a llevar con orgullo el sobrenombre del príncipe agricultor o príncipe granjero, pero finalmente el destino le llevó fuera de su país y cambió el campo por la Defensa y las labores diplomáticas.
Al poco de su marcha, la reina Mary habló de los sentimientos encontrados que tenía ante la marcha de su hijo mayor. “Esperamos con ansias todo lo que experimentará y aprenderá en su viaje, pero al mismo tiempo lo echaremos mucho de menos”, dijo.
En otras Cortes como la británica o la neerlandesa también hay tradición de que tras el colegio, los miembros más jóvenes de las monarquías disfruten de un año sabático en el extranjero. El príncipe Guillermo de Reino Unido pasó parte de su tiempo en Chile, Belice y en algunos países de África tras acabar sus estudios en Eton. También estuvo de entrenamientos con el Ejército y fue voluntario del programa Raleigh International en Tortel, al sur de Chile.
El príncipe Harry estuvo en Australia, Argentina y África, donde trabajó en un orfanato en Lesoto. En Australia estuvo trabajando en la granja Toolombilla con la familia Hill, que habían sido amigos de su madre.