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Margarita de Dinamarca y sus dos hermanas, la reina Ana María de Grecia y la princesa Benedicta, han reunido en la residencia de verano de la Casa Real danesa a gran parte de sus hijos y los consortes de estos. Una reunión excepcional que se ha convertido en una mini cumpre royal de primos que ha servido para ver a los miembros más desconocidos de la familia de la soberana danesa. A pesar de la distancia, muchos viven en países diferentes, parecen llevarse a las mil maravillas y así lo han demostrado con un posado de lo más veraniego y familiar.
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La Reina, con sus dos hijos y sus dos nueras
Sentada en el centro, Margarita de Dinamarca acudió a la cita con sus dos hijos y sus nueras. El príncipe heredero Federico, acompañado por la princesa Mary, y el príncipe Joaquín, que acaba de pasar unos días en Francia, con su esposa, la princesa Marie. Son la rama más conocida de las Casas Reales danesa y griega ya que tienen labores institucionales y algún día el primogénito de la monarca se convertirá en Rey.
Ana María de Grecia ycasi toda su familia
La reina Ana María de Grecia, hermana pequeña de la reina Margarita, acudió a la cita sin su marido, el rey Constantino. Con ella viajaron su hija la princesa Alexia y su marido, Carlos Morales, que residen en Yaiza (Lanzarote). También se desplazó hasta la tierra natal de su madre el príncipe Nicolás, sin su esposa, la princesa Tatiana, con la que comparte su vida en Atenas. La princesa Theodora y su prometido, Matthew Kumar, que viven en los Estados Unidos y Philippos de Grecia y la princesa Nina, que protagonizaron el pasado otoño una de las grandes bodas reales del año a la que no faltaron la reina Sofía y la infanta Elena. completan la estampa.
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La princesa Benedicta y sus desconocidos descendientes
La princesa Benedicta, hermana mediana de la monarca, y su familia son los miembros más desconocidos de la Casa Real danesa. La Princesa tiene un papel bastante importante dentro de la monarquía de su país pues además de estar en la línea de sucesión al trono ejerce de regente cuando ni su hermana, la Reina, ni su sobrino, el heredero, se encuentran en el país. Se casó el 3 de febrero de 1968 con el príncipe Richard zu Sayn-Wittgenstein-Berieburg, que falleció el 13 de marzo de 2017. Con él tuvo tres hijos, el príncipe Gustav, que en los últimos tiempos ha tenido cierto protagonismo tras casarse con Carina Axelsson, su pareja desde hace 19 años. Lograron casarse después de años de lucha en los tribunales para revocar una de las cláusulas del testamento de su abuelo que le impedía contraer matrimonio con libertad ya que dejó por escrito al morir, en 1939, que la esposa del jefe de la Casa tendría que ser de raza aria, noble y protestante para no perder los derechos dinásticos ni el castillo de Berleburg. Carina no establecía ninguno de esos requisitos.
Además de Gustav, también han acudido a la cita su hermana Alexandra, princesa zu Sayn- Wittgenstein-Berleburg, de 51 años, con su actual marido, el conde y terrateniente danés Michael Preben. La Princesa aportó al matrimonio dos hijos, Friederich e Ingrid, mientras que su esposo, que ya estuvo casado en dos ocasiones anteriores, tiene dos hijos de su primer matrimonio. Alexandra no tiene derecho a heredar el trono danés, según el consentimiento de Federico IX que estableció que debería haberse mudado a Dinamarca cuando comenzó su educación básica.
En último lugar aparece la otra sobrina más desconocida de la Reina, la princesa Nathalie zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, de 47 años, casada con Alexander Johannsmann con el que tiene un hijo, Konstantin, de 12 años y una hija, Louisa, de 7 años. Participó en los Juegos Olímpicos de Verano de Pekín 2008, donde obtuvo una medalla de bronce y el cuarto lugar en la Olimpiada de Londres 2012.