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Tan solo han faltado sus nietos y su hermana, la reina Ana María

Margarita de Dinamarca celebra su medio siglo en el trono junto a casi toda su familia

La soberana ha participado en varios actos, adaptados a las restricciones sanitarias, con motivo de su Jubileo de Oro


Actualizado 14 de enero de 2022 - 17:26 CET

Margarita de Dinamarca está de celebración. La Reina cumple este viernes 50 años en el trono y lo celebra acompañada por casi toda su familia con unas solemnes, pero reducidas celebraciones debido al avance de la sexta ola de la pandemia y la variante ómicron. La soberana fue proclamada monarca a los 31 años, tan solo catorce días después de la muerte de su padre, el rey Federico IX, y ha comenzado su Jubileo de Oro con un acto discreto, pero cargado de significado frente a las banderas reales. Después, acompañada del príncpe heredero, ha participado en una reunión con el Consejo de Estado. Tras esto ha acudido con la Familia Real al Parlamento y para finalizar la jornada ha depositado una corona de flores en la tumba de sus padres, Federico e Ingrid.

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Margarita de Dinamarca ha comenzado el día de su 50º aniversario en el trono frente a las banderas reales que recibió en 1972 cuando se convirtió en Reina

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Con un vestido azul con chaqueta a juego, las gafas que la acompañan desde hace ya varios años y su icónico moño, Margarita de Dinamarca ha llegado al castillo de Christiansborg, sede del Parlamento danés, llamado Folketing. En esta visita ha estado acompañada por su hijo mayor, el príncipe heredero Federico, su mujer, la princesa Mary, su hijo menor, el príncipe Joaquín, acompañado por su esposa, la princesa Mary y su hermana, la princesa Benedicta. A este aniversario en el que han firmado en el libro de visitas tan solo han faltado sus ocho nietos, que están en edad escolar, y su hermana, la reina Ana María. Aunque en un principio iba a desplazarse hasta su países natal, no ha podido viajar a causa de la infección por Covid de su marido, el rey Constantino de Grecia, quien ha sido dado de alta, la ha impedido viajar.

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Tras acompañar a su madre, el príncipe Federico, ya con Mary de Dinamarca, ha acudido al castillo de Christiansborg para un acto conmemorativo en el que ha participado toda la familia

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Joaquín y Marie de Dinamarca han viajado desde Francia hasta Copenhague para arropar a la soberana en esta fecha tan señalada

La primera en llegar ha sido la princesa Benedicta, vestida de morado, seguida de los príncipes herederos. La princesa Mary, muy elegante, ha elegido el color camel con un conjunto compuesto por falda y capa con zapatos al tono y tocado en color beige. Ha completado su estilismom con un imponente collar de perlas. Los príncipes Joaquín y Marie, que tienen su residencia fijada en París donde viven con sus dos hijos, han acudido al acto de lo más sonrientes. Marie de Dinamarca ha optado por un abrigo con cinturón en verde agua a juego con su cartera de mano y tocado y guantes en tono oscuro. Por su parte, la Reina ha lucido dos joyas llenas de significado. En la solapa de la chaqueta llevaba un broche de 238 diamantes y 444 piedras rosas engastadas en platino que fue un regalo de su madre y lo usó en su boda con Henrik de Dinamarca. En el pecho lucía otro broche con forma de herradura compuesto por rubíes que le dio su padre el día que fue proclamada heredera al trono.

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El momento más emotivo

Tras este importante acto, la reina Margarita y su familia se han desplazado desde Copenhague a la estación de la ciudad de Roskilde, un trayecto que ha durado aproximadamente media hora. Para este viaje en el que han sido recibidos entre muestras de cariño han usado el tren que la compañía danesa DSB le regaló a la monarca hace más de dos décadas, concretamente en el año 2000, coincidiendo con su 60 cumpleaños. Tras esto, y ya en coche, se han dirigido a la catedral de esta ciudad que se encuentra al norte de la isla de Selandia para hacer una ofrenda floral en las tumba de Federico IX y la reina Ingrid, padres de la monarca. El templo, de estilo gótico y rodeado hoy de curiosos que querían estar presentes en un día tan señalado, se construyó entre los siglos XII y XIII con ladrillo rojo, fue declarado Patrimonio de la Humanidad y albergas las tumbas de 20 reyes y 17 reinas, pero solo las de los padres de la reina danesa están en el exterior.

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Margarita de Dinamarca ya en Roskilde

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El mausoleo en el que han depositado las flores fue diseñado por los arquitectos Inger y Johannes Exner junto con el arquitecto de la catedral de Roskilde, Wilhelm Wohlert. La corona que ha colocado la Reina era de color azul mientas que la de la princesa Benedict era rosa. Se ha depositado una tercera amarilla de parte de Ana María de Grecia. Por su parte, tanto los príncipes herederos como Joaquín y Marie de Dnamarca han colocado coronas de laurel con sus respectivos emblemas.

© Keld Navntoft, Kongehuset

Frederik IX comenzó su reinado el 20 de abril de 1947 y estuvo en el trono durante casi 25 años, hasta su fallecimiento hace hoy medio siglo, el 14 de enero de 1972. Cuando fue proclamado Rey ya estaba casado con Ingrid de Suecia (la boda fue en Estocolmo), que fue un gran apoyo para él y con la que tuvo tres hijas: Margarita, Ana María y Benedicta. Según recoge la Casa Real junto a una imágenes conmemorativas, ambos pusieron en marcha una transformación de la monarquía.

© Keld Navntoft, Kongehuset

A lo largo de la jornada hemos visto a los miembros de la realeza luciendo una medalla conmemorativa por el medio siglo de reinado de Margarita de Dinamarca. Se trata de una pieza dorada con una corona en la parte superior. En el lado delantero aparece la monarca rodeada de los tres leones que custodian la entrada del castillo de Rosenborg. La cara posterior está grabada con el monograma de la Reina junto a la Orden de Dannebrog y la Orden del Elefante. Además aparece la inscripción "14 de enero de 1972- 14 de enero de 2022. También miembros de la corte y otras personas como la sombrerera Mathilde Førster, una de las favoritas de la Reina, han recibido la medalla

Las primeras celebraciones

La Reina ha comenzado el día frente a las banderas reales que se encuentran en el Palacio de Christian IX en Amalienborg. Estos estandartes fueron llevados a Palacio hace justo medio siglo y su entrega fue la primera señal institucional de que el país tenía un nueva soberana. Las banderas, esas que besó por primera vez ya como Reina hace cinco décadas, son un símbolo de la continuidad de la monarquía, tal y como ella dijo en sus memorias. Acto seguido ha participado junto con el príncipe Federico en una sesión del Consejo de Estado en el castillo de Christiansborg, tal y como ocurrió en 1972, cuando acudió a esta cita antes de que fuera proclamada Reina.

© Steen Brogaard, Kongehuse

Después y en compañía de su hijo mayor, el príncipe Federico, ha asistido a una sesión del Consejo de Estado en la que ha recordado la primera vez que participó como Reina

En esta reunión, la número 560 de este organismo durante su reinado, el número de participantes se ha reducido a tan solo cinco ministros, incluida la primera ministra Mette Frederiksen, debido a la crisis sanitaria. Ante el Gobierno, y para inaugurar el acto, Margarita de Dinamarca daba un discurso en el que recordaba la primera vez que se sentó en el Consejo de Estado con el entonces Primer Ministro Jens Otto Krag. Agradecía también la buena y respetuosa cooperación con los Gobiernos que ha visto a lo largo de estos años. Finalmente, la primera ministra la felicitó públicamente.