La nieve en Dinamarca ha cubierto con un manto blanco buena parte del país, dejando como resultado un gélido paisaje invernal. Pero eso no es excusa para no divertirse, y en la Familia Real danesa lo saben bien. Cuando los hijos de los príncipes Federico y Mary se encontraron con un lago congelado, lo tuvieron claro: se pusieron manos a la obra para convertirlo en su particular campo de juego. "La nieve y el hielo pusieron el ingenio en movimiento y un lago helado se convirtió en una pista de hockey sobre hielo. Después de la preparación, se convirtió en un partido de hockey sobre hielo alternativo... sin patines, con palos y una vieja pelota como disco", ha escrito la pareja real. Tal y como se ve en el vídeo, los niños acondicionaron bien el terreno y, a continuación, se pusieron a jugar. Dale al play y no te lo pierdas.