El coronavirus ha suspendido los grandes fastos con los que Margarita de Dinamarca iba a celebrar su 80º cumpleaños. Estaba previsto un extenso programa de actividades entre las que se iba a incluir una gran cena de gala a la que estarían invitados representantes de las Casa Reales. Sin embargo, la pandemia ha trastocado los planes, pero no ha quitado ni un ápice de ilusión y alegría a la soberana que ha recibido el cariño de su familia y de su pueblo por vía telemática y muchas felicitaciones de Reyes y príncipes, incluidos don Felipe y doña Letizia que le mandaron un vídeo con sus mujeres deseos. Pese a las restricciones, Margarita fue homenajeada por el personal de Palacio con una canción nada más levantarse y ofreció un emotivo discurso a la nación para, después, cenar con sus hijos y sus nueras. Un cumpleaños atípico, pero cargado de emotividad.
Desde bien temprano y para enmarcar una fecha tan señalada la Casa Real danesa distribuyó nuevas fotografías oficiales de su soberana, anunció una nueva moneda conmemorativa, compartió la partida de nacimiento de la Reina y desveló los entresijos de algunas de sus aficiones: el arte y la escenografía de obras de teatro. Ya por la tarde, la Reina dirigió un discurso en el que confesó que “siempre me ha encantado poder celebrar mi cumpleaños. Ser capaz de sentir, literalmente la emocionante atmósfera de ese día. Siempre ha significado algo especial para mí”, comenzó la Reina. “Este año nos ha visitado un peligroso invitado que ha dejado su huella en todo el país. Muchas fiestas, celebraciones y bodas se han visto trastocadas y también mi cumpleaños. ¿Ha sido un día largo y triste entonces? No, para nada. Más bien al contrario, el día me ha traído muchas alegrías y me ha enriquecido más de lo que pueda decir. Me conmueve profundamente que tantas personas hayan querido unirse a mí para celebrarlo. Agradezco de todo corazón los saludos, las canciones y las muchas felicitaciones que han llegado desde todas las partes del reino.
- Sonriente, natural y muy bien acompañada, el posado de Margarita de Dinamarca por su 80 cumpleaños
“Recordaré mi 80º cumpleaños como algo único, uno de los más memorables. Aquí también se ha demostrado que cuando la crisis nos golpea, podemos reunirnos en comunidad, juntos, pero a distancia”, continuó la monarca. “Mi cumpleaños no fue como lo imaginé, pero estoy agradecida por lo que se convirtió, gracias a todos los que ayudaron a que fuera un día festivo y memorable. Estamos abriendo lentamente Dinamarca nuevamente. Mis pensamientos y saludos se remontan a cada uno de los habitantes de este país y en todo el Reino con el deseo de esperanza, consuelo y coraje. Dios salve Dinamarca”, finalizó Margarita en su discurso que fue televisado a las 19:00 horas por televisión.
Más tarde, la Reina celebró una cena en el Castillo de Fredensborg a la que acudieron sus hijos y sus nueras. Los príncipes Federico y Mary y Joaquín y Marie llegaron en dos coches para una recepción que tuvo lugar a las 20.00 horas. La velada se alargó hasta las 22:30 horas momento en que los invitados de la Reina abandonaron Palacio, según informa el periódico danés Billed Bladet. Los dos matrimonios regresaron con sus familias a los Palacios de Federico VIII y de Christian VIII, respectivamente donde están pasando el confinamiento.