La Monarquía danesa es una familia de tradiciones. Si hay que poner el árbol de Navidad, se pone y Mary de Dinamarca es la encargada de inmortalizarlo y compartirlo, a través de la cuenta oficial de la Casa Real en Instagram, con los más de 271.000 seguidores. Que hay que acudir a la tradicional recepción al cuerpo diplomático en la residencia oficial de Christiansborg, pues los miembros de la Familia Real se ponen sus mejores galas y acuden a desear un feliz año nuevo a los embajadores. Así ha ocurrido este mismo jueves, cuando la reina Margarita de Dinamarca, acompañada de su hijo Federico y de su nuera se han dejado ver en este solemne acto.
Para la ocasión, Mary de Dinamarca ha decidido reciclar un elegante vestido gris con detalles de encaje que ya utilizó para este mismo evento hace exactamente dos años. Esta vez ha decidido lucir un semi recogido, la correspondiente banda azul de la orden de caballería más antigua y distinguida de Dinamarca y unos pendientes de perlas, el único accesorio diferente con respecto al look de enero de 2017. El estilismo, pese a no haber sorprendido por ser ya conocido, ha deslumbrado del mismo modo que lo hizo en aquella ocasión.
Por su parte, el heredero, Federico de Dinamarca, ha acudido al acto con el traje ceremonial. La pareja se ha unido a la reina Margarita, que ha optado por un vestido de seda azul de piel, que también llevó el año pasado. La Monarca, que ya tiene 78 años, ha recibido al cuerpo diplomático sentada en una silla. La Familia Real también suele recibir a los jueces de la Corte Suprema, la Guardia Real y el Cuerpo de Oficiales del Regimiento de Gardehus, además de a los oficiales de las Fuerzas Armadas, la Agencia de Gestión de Emergencias y a los representantes de las principales organizaciones y fundaciones.
Este es uno de los últimos actos oficiales navideños de la Familia Real danesa, que vive este año sus primeras fiestas sin el príncipe Henrik. El marido de la Reina -y su compañero de vida durante más de cinco décadas- falleció el pasado 13 de febrero a causa de una infección pulmonar que agravo su ya de por sí delicado estado de salud. Con todo, a buen seguro que sus ocho nietos han conseguido sacar una sonrisa a Margarita de Dinamarca, quien poco antes de estas fechas tan señaladas avanzaba cómo iba a pasar la Navidad. "Será genial con todos los nietos. Una feliz Navidad, así lo creo", comentó durante una rueda de prensa del ballet El Cascanueces, en el que ella ha estado al frente de la escenografía y el vestuario.
La tradición navideña que romperá este año Margarita de Dinamarca