La Familia Real danesa vacía sus agendas para volcarse en el príncipe Henrik

La Casa Real de Dinamarca no ha vuelto a informar del estado de salud del príncipe Henrik desde el pasado viernes, cuando advirtieron que “lamentablemente su estado de salud había empeorado mucho”. Desde entonces el movimiento en torno al Rigshospitalet de Copenhague, en donde el marido de la reina Margarita está ingresado, es constantes y la Familia Real comienza la semana vaciando su agenda.

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Tanto la Reina como los príncipes Joaquín y Federico, este último tuvo que regresar de urgencia desde Corea del Sur en donde se encontraba de viaje oficial debido al empeoramiento de su padre, han despejado su agenda para estar pendientes de salud del Príncipe. De momento solo se mantiene el viaje que tiene programado la princesa Mary el próximo viernes a Lituania con motivo del centésimo aniversario de la restauración del Estado y no es hasta el miércoles 21 de marzo cuando la Reina mantiene una cita en su calendario.

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Este lunes la Reina llegaba al hospital por la mañana para hacer una breve visita, mientras que el príncipe Joaquín haría lo mismo por la tarde. Durante el fin de semana el goteo de visitas ha sido constante, entre ellas las de sus ocho nietos y la del mariscal de la Corte, Michael Ehrenreich, lo que fue interpretado como “una señal de que la situación es seria” por algunos medios del país como Berlingske.

El medio BT ha publicado este  lunes que Étienne de Monpezat, hermano del Príncipe, también había dejado Cahors (Francia) para poner rumbo a Copenhague. "Obviamente estamos muy preocupados por su salud y esperamos que mejore", ha dicho al citado medio en lo que se ha interpretado como una nueva señal de alarma ya que en primer momento Étienne de Monpezat, de 75 años, dijo que no iba a hacer el viaje.

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El marido de la soberana se encontraba de vacaciones en Egipto el pasado mes de enero, un descanso que tuvo que interrumpir para viajar a Copenhague a fin de "someterse a nuevas pruebas", tal y como se informó desde el Palacio. Una infección respiratoria y la detección de un tumor en el pulmón izquierdo, que resultó ser benigno, hicieron que el príncipe consorte tuviera que ser trasladado a la unidad de infecciones para continuar con su tratamiento. Durante los últimos días, su estado de salud se ha deteriorado hasta el punto de preocupar a su familia.