Hoy la Casa Real danesa ha lamentado con enorme tristeza anunciar el fallecimiento del príncipe Richard, marido de la princesa Benedicta. Su Alteza, VI Príncipe de Sayn-Wittgenstein-Berleburg, murió repentinamente ayer por la noche en el castillo de Berleburg, cerca de Kassel en Renania del Norte-Westfalia, según informa en un breve comunicado Tommy M. Paulsen, que es el secretario privado de la hermana de la reina Margarita. La princesa Benedicta se encontraba pasando una breve estancia en Dinamarca y viajó esta misma mañana a su residencia en la localidad alemana
El príncipe de las botas de goma
Richard de Sayn-Wittgenstein-Berleburg fue un hombre de la Familia Real danesa, aunque jamás hizo ostentación ni de sus títulos ni de sus lazos reales. Se ha dicho que el Príncipe siempre prefirió calzarse las botas de goma a los zapatos de charol y trabajar los suelos forestales a los mármoles de palacio. Pero los concilió por amor a la princesa Benedicta, con la que se casó en 1968 y ha sido padre de tres hijos, Gustav, Alexandra y Nathalie.
Las dos hijas lo convirtieron en abuelo hasta en cuatro ocasiones. Gustav no tiene hijos, pero es el heredero del príncipe Richard, de la propiedad del castillo y de las asociadas 15.000 hectáreas de bosque. Padre e hijo tenían una estrecha relación, que se fortaleció aún más cuando hace unos años el príncipe Richard padeció de cáncer de piel y tuvo que someterse a un tratamiento de quimioterapia agotador.
Richard de Gloucester, cuyo nombre completo es Richard Casimir Karl August Konstantin zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, era hijo de la princesa Margareta de origen sueco y gran amiga de la reina Ingrid. Su padre, el príncipe Gustav Albrecht, que murió en el frente durante la Segunda Guerra Mundial. Después del conflicto, la madre viajó regresó a Suecia, donde el príncipe Richard vivió hasta su regreso a Alemania para estudiar derecho y más tarde silvicultura. Hubiera cumplido el 29 de octubre 83 años.