El féretro con los restos mortales de la reina Fabiola abandonó por última vez el Palacio Real de Bruselas a las 9:15 horas en dirección a la catedral de San Miguel y Santa Gúdula, la misma que acogió las exequias del rey Balduino en 1993 y su boda hace ya 54 años
Felipe y Matilde de los Belgas con sus cuatro hijos encabezaron el cortejo fúnebre, seguidos por los reyes Alberto y Paola y el resto de la Familia Real belga
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La princesa Elisabeth, en perfecto neerlandés, ha recordado la pasión de sus tíos abuelos por la paz, mientras que su hermano ha subrayado la entrega de la Reina por los más débiles y los excluidos de la sociedad
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Matilde y Felipe de Bélgica, unidos en el dolor por la pérdida de la reina Fabiola, a la que estaban muy unidos
Los restos mortales de la reina Fabiola llegaron a la catedral junto a la Familia Real belga. A los acordes de La Brabanzona, himno nacional de Bélgica, los carabineros portaron el féretro de la Reina al interior de la iglesia, donde reposó ante el altar, cubierto por la bandera nacional y acompañado por el retrato en blanco y negro de la reina con su marido
Los hijos de Laurent y Claire de Bélgica, los príncipes Luisa, de 11 años, y los gemelos Aymeric y Nicolás de Bélgica, que cumplirán próximamente 9 años
Un continuo goteo de Reyes y Príncipes de luto llega al templo para arropar a la Familia Real de los belgas. Los Grandes Duques Enrique y María Teresa de Luxemburgo, el príncipe heredero Guillermo y su esposa, la princesa Stéphanie, los reyes Juan Carlos y Sofía, Margarita de Dinamarca, Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, Beatriz de Holanda, Moulay Rachid de Marruecos, hermano del Rey, la emperatriz Farah Pahlavi de Irán, la princesa Sirindhorn Tailandia y la emperatriz Michiko de Japón arropan el féretro