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Fabiola Fernanda María-de-las-Victorias Antonia Adelaida de Mora y Aragón nació en Madrid en 1928 en el palacio de Zurbano. Fue la cuarta de los siete hijos del Marqués de Casa Riera y Conde de Mora y de la Marquesa de Casa Torres, y vivió su infancia y juventud en el seno de una familia de clase alta
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Siempre fue una buena estudiante con un gran afán por aprender, adquiriendo una enorme cultura que, aunque en aquel momento no lo supiera, le sería muy útil cuando, años después, se convirtiera en Reina de los belgas
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El rey Balduino y Fabiola mantuvieron su romance en secreto durante todo un año. Se ven ante la Virgen de Lourdes, en rincones ocultos y siempre disfrazados de modestia
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En el año 1960, finalmente dieron a conocer su relación mediante el anuncio de su compromiso. El desconocimiento de su discreto noviazgo y lo inesperado de la noticia hicieron que toda Europa se quedara con la boca abierta
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Ella fue una de las pocas españolas que ocuparon un trono extranjero. En la imagen, Fabiola posa con familiares españoles
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Una Reina española para los belgas
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Con el paso de los años, se supo el curioso dato de que, durante sus meses de novios, Balduino puso a Fabiola el cariñoso seudónimo de ‘Ávila’, por ser ésta la ciudad natal de Santa Teresa
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Sería el obispo auxiliar Leo Suenens, quien después se convertiría en arzobispo de la archidiócesis de Malinas-Bruselas, el que casara al rey Balduino y Fabiola el 15 de diciembre de 1960, en la Catedral de San Miguel de Brusela
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Balduino y Fabiola se casan en Bélgica y los españoles, por primera vez, pueden ver la transmisión de una ceremonia por televisión... Fue el 15 de diciembre de 1960
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El amor y la admiración en una imagen: Fabiola escuchando con atención un discurso de su marido en el año 1973
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Son varias las teorías que explican cómo se conocieron Fabiola y Balduino, siendo la más aceptada la que cuenta que su encuentro se produjo por la intervención de una monja irlandesa
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Fueron 33 años de feliz matrimonio empañados tan sólo por la ausencia de hijos. En 1961 se produjo el primer aborto de Fabiola, seguido por un segundo un año después. Tras tres abortos más, los médicos aconsejaron a los Reyes cejar en su empeño de ser padres debido a los riesgos que suponía para la Reina
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No obstante, ellos se centraron en cuidar con amor a sus sobrinos, Felipe, Astrid y Laurent
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La reina Fabiola hizo numerosos viajes en su juventud, y continuó viajando mucho tras su matrimonio
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Fabiola y Balduino en París
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El matrimonio durante unas vacaciones en Gstaad
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Durante otro de sus exóticos viajes, en esta ocasión a Argelia en 1990, uno de los últimos que hicieron juntos
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Imagen emitida el 11 de diciembre de 1985, por las bodas de plata de la pareja real de bodas de plata de la pareja: el rey Juan Carlos, la reina Fabiola de Bélgica y la reina Sofía disfrutan de una soleada tarde en los terrenos del palacio de Laeken
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La relación de Fabiola, madrileña de nacimiento, y Balduino con la Familia Real Española siempre fue fantástica
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La reina Fabiola de Bélgica junto a la reina Sofía
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La reina Fabiola con el entonces príncipe Felipe, actual rey Felipe VI
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Las Casas Reales europeas lloran ahora el fallecimiento de la reina Fabiola; su relación con ella fue muy buena durante toda su vida
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La devoción religiosa de Fabiola fue una de las muchas cosas que tenía en común con Balduino. Tal era su fervor religioso que, en su juventud, se planteó convertirse en monja, aunque desechó este proyecto al enamorarse de Balduino. En la imagen, durante la visita del papa Juan Pablo II en 1985
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Imagen tomada casi veinte años después, en 2004, de Fabiola besando la mano del papa
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Lejos de mantenerse en un segundo plano durante el reinado de su marido, Fabiola implicó en innumerables causas, sobre todo las relacionadas con los niños y las personas marginadas
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Disfrutaba ayudando a los más desfavorecidos, especialmente tratándose de niños, y siempre contribuyó a las causas en las que creía
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Una Reina comprometida con la infancia
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La música, una gran pasión de Fabiola de Bélgica
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Ella fue una gran impulsora de la cultura y muy especialmente la música, como demuestran sus esfuerzos por convertir el Concurso Musical Internacional Reina Elisabeth en un certamen puntero de la música culta
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Fiel asistente a todo tipo de conciertos y recitales
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La reina Fabiola de Bélgica entregando el Volin Stradivarius al ganador del concurso australiano Ray Chen, en la ceremonia de la entrega de los premios del violín Concurso musical Reina Elisabeth de 2009
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El deporte también fue una afición para Fabiola
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Imagen de Fabiola y Balduino jugando con raquetas
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El ciclista belga Eddy Merckx (centro) en el Castillo Real de Laeken, Bruselas, con el rey Balduino y la reina Fabiola después de ganar el Tour de Francia, 23 de julio 1969
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Después del fallecimiento de su marido, Fabiola de los belgas siguió manteniendo el título de Reina. En septiembre de 1993, pocos meses después del deceso del Rey, la reina Fabiola asumió la presidencia de la Fundación Rey Balduino, una organización consagrada a la mejora de las condiciones de vida de los más desfavorecidos en Bélgica.
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Fabiola y Balduino durante la boda de la princesa Astrid de Bélgica en 1984
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La siguiente boda de uno de sus sobrinos, la de Felipe y Matilde de Bélgica el 4 de diciembre de 1999, ya no pudo contar con la presencia de Balduino, fallecido seis años atrás
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Fabiola en la boda del príncipe Laurent en 2003
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El 31 de julio de 1993, durante unas vacaciones en Granada, España, fallece el rey Balduino. Además, su muerte puso de manifiesto, a través de los medios de comunicación, su prestigio internacional.
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Después de la muerte del Rey, habiendo podido regresar a España o haber vivido a caballo entre los dos países no lo hizo a pesar de que su decisión implicara tener que abandonar Laeken, el palacio donde ella y su esposo vivieron durante 33 años
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Después del fallecimiento de su marido, Fabiola de los belgas siguió manteniendo el título de Reina y acompañando a la Familia Real en actos oficiales. En septiembre de 1993, pocos meses después del deceso del Rey, la reina Fabiola asumió la presidencia de la Fundación Rey Balduino, una organización consagrada a la mejora de las condiciones de vida de los más desfavorecidos en Bélgica.
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Pese a ser familiares consanguíneos no suyos, sino de su marido, Fabiola siempre se consideró en familia con ellos. Todos estuvieron junto a ella en sus últimas horas, demostrándole un enorme amor
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Después de tantos años, la soberana consideraba a los sobrinos de Balduino como suyos
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La relación fue especialmente estrecha con su sobrino Felipe y, posteriormente, con su esposa, Matilda, actuales Reyes de los belgas
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Fermín J. Urbiola publicó la primera biografía sobre Fabiola escrita por un español, 'Nacida para ser Reina': 'Fabiola de Mora y Aragón ha sido una de las mujeres españolas más importante del siglo pasado', afirmaba
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Fabiola publicó su propio libro, 'Los maravillosos cuentos de hadas de la reina Fabiola'
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En junio de 2008, la reina Fabiola cumplió 80 años, una cifra redonda y muy destacada que celebró con su familia y compartiendo una emotiva anécdota: contó que por su 50º cumpleaños fue obsequiada con una espléndida tarta de chocolate por parte de la madre de una niña discapacitada, Chantal. Treinta años después los padres de aquella niña compartieron con la Reina, a la que guardan un enorme cariño, su octogésimo aniversario, con otra tarta de chocolate
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La Reina compartió su celebración con otros dos miembros de la Familia Real que también cumplían años en la misma época: el 74º del rey Alberto (6 de junio de 1934) y el 46º de la princesa Astrid (5 de junio de 1962)
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En noviembre de 2012 volvían a saltar las alarmas por su salud cuando la Casa Real anunció que, debido a su delicado estado, la Reina no asistiría a las celebraciones del Día del Rey, una cita a la que nunca había faltado. Aunque ni siquiera pudo acudir en silla de ruedas a la misa del Te Deum, los portavoces de Palacio lanzaron también un mensaje tranquilizador: "la Reina se encuentra bien. Aún es capaz de andar, si bien tiene problemas para mantenerse en pie durante periodos largos de tiempo"
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Durante los últimos años, su avanzada edad y sus problemas de salud hicieron que el estado de la reina Fabiola se resintiera. Esto se acentuó especialmente a partir de 2009, cuando la soberana sufrió una grave neumonía
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Saludo desde el balcón de la Familia Real belga tras la abdicación del rey Alberto II el 23 de julio de 2013
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Su última aparición púbica: durante el 20 aniversario de la muerte de Balduino en la Catedral de Saints-Michel-et-Gudule el 31 de julio de 2013 en Bruselas. Pese a su delicado estado, quiso hacer esta muestra de amor a su marido
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Fabiola fue una Reina muy querida en bélgica; hoy, todos lloran su muerte
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