Tras una semana de titulares sobre una supuesta gran fiesta en Córdoba a la que habría Joaquín de Bélgica para después dar positivo en coronavirus, finalmente se confirma que no hubo una gran fiesta, sino dos reuniones, celebradas en diferentes días en las que se respetó el aforo permitido en la fase 2, que es en la se encuentra la ciudad andaluza. Es lo que concluye el informe policial, dando así la razón a la versión que sostuvo en todo momento el entorno del príncipe y de su novia, Victoria Ortiz. No obstante, el sobrino del Rey de los belgas sí incumplió la norma que le obligaba a guardar una cuarentena de dos semanas al llegar a España, algo por lo que ha pedido disculpas.
La familia siempre había asegurado que nunca se reunieron 30 personas, sino que el lunes 25 de mayo quedaron 12 personas en la finca de Hornachuelos de la familia de Victoria para dar la bienvenida al príncipe belga. Al día siguiente, en otra vivienda de la ciudad se celebró la fiesta de cumpleaños de la joven cordobesa al que asistieron 15 personas, el límite permitido por la normativa, y a la que también asistió su pareja, Joaquín de Bélgica. Ahora, según informa ABC, la policía nacional confirma esta versión, lo que aleja a los investigados de una multa que podría oscilar entre los 600 y los 10.000 euros.
Victoria, la española que podría entrar en la Familia Real belga
El aristócrata se recupera ahora del COVID-19 mientras lidia con la polémica desatada, que incluso ha llevado a pronunciarse al Gobierno belga. La primera ministra, Sophie Wilmès ha querido zanjar la cuestión amparándose en las disculpas del hijo de Astrid de Bélgica. “Es un ciudadano que se disculpó por un comportamiento que lamenta. Dice que asumirá todas las consecuencias y eso es bastante normal. Caso cerrado”, aseguró en la reapertura del Atomium de Bruselas. Por su parte, el implicado difundía un comunicado a través de su abogado en Córdoba, Mariano Aguayo Fernández Córdovav: "Me gustaría disculparme por no haber respetado todas las medidas de cuarentena durante mi viaje. En estos momentos difíciles no pretendía ofender ni faltar el respeto a nadie. Me arrepiento profundamente de mis actos y acepto las consecuencias.
Puesto que los viajes turísticos o de placer a España aún no están permitidos, la Casa Real había justificado el desplazamiento del príncipe asegurando que iba a hacer unas prácticas laborales en una empresa. No obstante,su presencia en ambos evntos nada tenía que ver con cuestiones profesionales, sino con festejar el cumpleaños de su novia, con la que lleva seis años de discreta relación. Victoria Ortiz, a la que conoció en Bruselas mientras ella cursaba una beca en el Parlamento Europeo, procede de una familia muy conocida y con mucha historia en la ciudad de Córdoba. Hija de María Victoria Martínez-Sagrera y Antonio Ortiz, que se dedican a la cría ecológica de vacas retinta en una finca de de 900 hectáreas en Villafranca de Córdoba