Jordania ha seguido con entusiasmo el partido de fútbol que los ha enfrentado este jueves a Irak en el marco de la eliminatoria de la Copa del Mundo, evento deportivo que se celebrará en 2026. De la competición, que ha acabado con empate a cero, ha estado muy pendiente el príncipe Hussein. El heredero al trono hachemita no se ha desplazado al estadio Internacional de Basora, sino que ha disfrutado del encuentro desde palacio y con la mejor compañía posible: la de su hija, Iman Bint Al Hussein, que nació el 3 de agosto, catorce meses después de su boda real con Rajwa Alseif.
La princesa Iman, que comparte nombre con una de sus tías, ha coordinado el look con el de su padre, quien la tiene cogida en brazos y la mira con una sonrisa. Mientras que el príncipe Hussein luce la camiseta oficial de la selección jordana, la pequeña lleva el escudo en un body blanco abotonado en la parte delantera. "¡Iman justo antes del partido de hoy!", ha dicho el futuro monarca.
Ambos posan en una habitación que parece ser la de la niña, una estancia doble en la que se aprecian detalles infantiles como un caballito balancín blanco y rosa, una hamaca de bebés y una mantita de juego, también conocida como gimnasio, para que la princesa Iman explore y aprenda. Además, hay varias alfombras en colores claros, una lámpara en tamaño XL y un gran ventanal. La imagen nos permite ver lo mucho que ha crecido la nieta de los reyes Abdalá y Rania, una niña morena y muy despierta.
La vida personal de los Reyes ahora gira también en torno a la princesa Iman, cuyo nacimiento nos está permitiendo ver un lado hasta ahora desconocido de la Familia Real y descubrir rincones privados de palacio. Emocionantes fueron las imágenes de Abdalá y Rania de Jordania yendo con sus hijos al hospital para conocer a la princesa Iman, su adorada nieta; llena de emotividad es la estampa cotidiana del monarca y su esposa en el sofá con su nieta; y sorprendente ha sido ver cómo la reina concilia para estar el máximo tiempo posible con la niña.
"Pequeña Iman, ya te has apoderado de mi corazón. Nuestra familia nunca ha sido más feliz", decía Rania de Jordania al convertirse en abuela por primera vez. Tan emocionada está con este nuevo rol que incluso se ha llevado a su nieta al trabajo. Hace unos días continuó con su agenda institucional desde casa y sorprendió apareciendo en una reunión con la niña en brazos. "La primera reunión por Zoom con la junta directiva de la princesa Iman a principios de esta semana", dijo junto a la imagen del que podría considerarse el primer acto oficial de la niña.
Los Reyes siempre han demostrado ser muy familiares y en esta nueva era que ha empezado para ellos no quieren perderse ninguna de las etapas de su nieta. Ambos esperaban con impaciencia el nacimiento y Rania estuvo comprando ilusionada varias cosas para las primeras semanas de vida de la niña. Además, su deseo es estar al lado de los príncipes Hussein y Rajwa para ayudarles en todo lo que necesiten ahora que se han convertido en padres. "Estamos encantados de empezar este nuevo capítulo de nuestras vidas. Nuestra familia está creciendo y estamos emocionados por dar la bienvenida al mundo a nuestra pequeña", dijo el heredero al trono en Hello! Arabia.