A sus 17 años, Lalla Khadija de Marruecos ya se ha coronado como la joya del reino alauí. La hija menor de Mohamed VI ha causado sensación en su primer gran acto de Estado con la visita que Emmanuel y Brigitte Macron han realizado al país africano. Su saber estar, su elegancia y su dominio de la escena y del protocolo la han convertido en un nuevo activo para la monarquía de su padre. Hasta su debut de esta semana, la Princesa era un enigma, ya que ha tenido contadas apariciones públicas que pasamos a desvelar.
Nació en Rabat el 28 de febrero de 2007 y es solo dos meses mayor que la infanta Sofía. Lalla Khadija se lleva cuatro años con su único hermano, el príncipe heredero, Moulay Hassan, quien ya es un habitual en la agenda oficial del Reino y que, incluso, ha sustituido a su padre en algunas ceremonias. Su nacimiento se vivió como una auténtica fiesta y su padre, para celebrarlo, emitió un decreto real perdonando a miles de prisioneros de sus condenas. El mismo día en que vino al mundo tuvo su primer posado oficial. Su orgulloso padre la sostuvo en brazos para presentarla y un espectáculo de fuegos artificiales cerró las festividades por su nacimiento.
Después, se la vio en los cumpleaños de su infancia, bodas reales marroquíes y en la inauguración de la Casa de la Vida para los Niños de Casablanca, el que se considera su primer acto oficial que llevó a cabo junto a su madre y cuando tenía tan solo seis años. La Princesa ha heredado el cabello rizado de su madre, Lalla Salma. Con solo diez años, Lalla Khadija tuvo la oportunidad de conocer al matrimonio Macron, con el que acaba de reencontrarse. Ocurrió en una cena de bienvenida donde toda la Familia Real recibió al mandatario galo, quien se deshizo en atenciones hacia la Princesa, y a la primera dama. Ya entonces, Lalla Khadija acudió vestida de larga con un diseño de clara inspiración marroquí.
Su encuentro con los reyes Felipe y Letizia
Desde bien pequeña, Lalla Khadija ha estado acostumbrada a conocer a grandes personalidades como el Papa Francisco o a los reyes Felipe y Letizia, a los que recibió en 2019 y con los que tuvo oportunidad de conversar en la sala de autoridades del aeropuerto de Rabat. Ese mismo año inauguró el jardín zoológico Nacional de Rabat, su primera aparición oficial en solitario. Ya a esa edad dio grandes muestras de seguridad y aplomo. Un año antes y con solo 11 años, fue portada de una revista femenina marroquí donde lucía el tradicional vestido verde y dorado, ocho meses después de que fuentes cercanas a Palacio confirmasen a ¡HOLA! el divorcio entre el monarca y la princesa Lalla Salma.
Tras una infancia con algunas apariciones públicas, lo cierto es que la adolescencia de Lalla Khadija ha sido un misterio y por eso su reaparición de estos días ha causado tanto furor. El año pasado acaparó todas las miradas en el 24º aniversario de la entronización de su padre, aunque permaneció en un segundo lugar.
Ahora, a punto de convertirse en mayor de edad, la princesa marroquí ha demostrado que es un gran apoyo institucional para su padre y seguramente en un futuro no muy lejano, su presencia crezca aún más. El Rey se apoya mucho, además de en su heredero, en sus cuatro hermanos, Moulay Rachid, Lalla Maryem, Lalla Asma y Lalla Hasna, quienes participan activamente de la vida oficial del Reino. Así que todo apunta a que cuando su hermano se convierta en Rey, Lalla Khadija será un puntual primordial para la monarquía alauí y quien sabe si ejercerá como una especie de primera dama hasta que el heredero se case.