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El pasado miércoles 2 de octubre, poco después de que Casa Real anunciara que, debido a la delicada situación que atraviesa Oriente Medio, se modificaba el viaje oficial que los Reyes tenían previsto a Jordania —del sábado 5 al lunes 7— y solo iría Felipe VI, doña Letizia protagonizaba un plan privado por las calles del centro de Madrid, intentando pasar desapercibida tras sus gafas de sol y con una imagen muy diferente a la que nos tiene acostumbrados en sus apariciones oficiales.
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Hacía tiempo que no la veíamos disfrutando de planes en solitario fuera de su agenda. Las últimas veces fueron en junio de 2023, cuando sorprendió su presencia en el parque de El Retiro paseando por los puestos de la Feria del Libro, y, un año antes, acudiendo al Teatro Real, junto a una amiga, para ver una ópera con la estrella del cine francés Marion Cotillard como protagonista. Con don Felipe y con sus hijas sí suele hacer muchos planes culturales y gastronómicos de carácter privado, pero, en los últimos años, pocas veces ha sido fotografiada sola.
En Colombia
Como siempre, ha intentado buscar el anonimato yendo de incógnito, esta vez, tan solo con unas gafas de sol, ya que en anteriores ocasiones también ha utilizado gorros y fulares para no ser reconocida. Estuvo en un restaurante de cocina típica colombiana, llamado La Rochela, que se encuentra en la calle Cardenal Cisneros. Este establecimiento cuenta en su carta con platos tradicionales como arepas, carimañolas, tamales y varios tipos de carnes y pescados, sabores que no son nuevos para ella, ya que le gusta probar la gastronomía de distintos países. Concretamente, la cocina colombiana la conoce bien, ya que en su época de alumna de Periodismo visitó Cali para asistir a un encuentro de estudiantes y, casi tres décadas después, en junio de 2023, regresó a esa misma ciudad en un viaje de cooperación, con el que también visitó Cartagena de Indias.
Para este almuerzo en el madrileño barrio de Chamberí, doña Letizia llevó un look casual, como le gusta vestir fuera de palacio. Apostó por unos pantalones vaqueros acampanados, como los que llevó, días antes, en Galicia, cuando salió a almorzar con Felipe VI y Leonor por Villagarcía de Arosa, y los combinó con un jersey de rayas azul marino y blanco —su estampado favorito en prendas de punto—, calzado plano y una gabardina, ya que se preveían lluvias en la capital ese día. Se mostró, además, al natural, sin maquillaje y con un peinado con el que se aprecian más sus canas, y algo más delgada.
Grandes citas
Doña Letizia ya tenía preparada la maleta para su viaje de Estado, con el que regresaría a Jordania 20 años después de su luna de miel. Una cita que había generado una gran expectación por su encuentro con los Reyes jordanos, con los que guardan una muy buena amistad, y por el 'duelo' de estilo con la Reina Rania, quien es, como Letizia, una de las reinas más alabadas por su elegancia. Pero sus planes han dado un giro de última hora por la tensión que se vive desde los últimos días en Oriente Medio y solo irá don Felipe, quien, además, regresará un día antes de lo previsto.
No es la primera vez que los Reyes ven cómo se cancela o modifica una visita de Estado. En los últimos años, les pasó en 2016, cuando iban a ir a Reino Unido y, por el proceso de formación del nuevo Gobierno de España, tuvieron que cancelarlo, y en 2015, cuando, nada más llegar a París, se anuló su agenda en Francia a causa de un trágico accidente ocurrido en los Alpes.
El viaje de Letizia al reino hachemita de Jordania era la primera de las grandes citas que tiene este mes, entre las que figuran el tradicional desfile del Día Nacional y la entrega de los Premios Princesa de Asturias.