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Kate Middleton ha anunciado que ha finalizado su tratamiento de quimioterapia y que inicia una "nueva fase de recuperación con un renovado sentido de esperanza y aprecio por la vida". Ha comunicado la esperada noticia mediante un vídeo grabado en su casa de campo de Anmer Hall que nos permite ver cómo ha pasado las vacaciones y lo mucho que ha disfrutado estas semanas de sus tres hijos, cuyas travesuras y muestras de amor han hecho sonreír constantemente a la princesa de Gales.
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Tras unos meses de incertidumbre, la luz se ha abierto camino y los príncipes de Gales han disfrutado de un verano muy familiar en el que sus gestos hablan por sí solos. Han disfrutado como nunca de "las cosas simples pero importantes de la vida, que tantos de nosotros a menudo damos por sentadas".Y no cabe duda de que la alegría de sus niños y sus divertidas ocurrencias forman parte de esos pequeños gestos cotidianos que ahora cobran otro sentido.
El príncipe George (11) ha demostrado estar muy cómodo ante el objetivo y en un momento se ha acercado simpático para preguntar si estaba grabando. Le han seguido sus hermanos, saludando a la cámara mientras se colocaban sobre una manta colocada en el suelo para jugar a las cartas. También con la princesa Charlotte y el príncipe Louis ha subido y bajado por varios troncos que estaban apilados formando una 'montaña' en la que los observaban sus padres, sentados y sin soltarse de la mano.
Muy divertido es el momento en el que la princesa Charlotte (9) se pone a gritar al creer que va hacia ella un insecto que segundos antes su padre le quita con ayuda de una carta. La única hija de los príncipes de Gales, a la que vimos con Kate Middleton en la final de Wimbledon es muy cariñosa y está muy pendiente de su madre, a la que da la mano mientras pasean y le da abrazos espontáneos, igual que el príncipe George.
Desde que nació en 2018, el príncipe Louis ha conquistado a todos en sus apariciones públicas por su simpatía y espontaneidad, la misma que muestra también en la intimidad. Así lo vemos en el vídeo, en el que aparece sentado en un gran columpio de madera colgado entre dos árboles mientras su madre empuja para poder darle impulso. En un momento, se le ocurre ir más allá y ponerse de pie sobre la base.
En las rutas que han hecho por los impresionantes terrenos naturales que rodean a la vivienda, cercana a Sandringham, Louis de Gales se ha comportado como un auténtico explorador. Ha cogido algunas ramas que ha ido moviendo según caminaban e incluso se ha atrevido a subirse a un altísimo árbol, ¡solo apto para los más valientes! Con decisión ha ido ascendiendo varios metros mientras Kate Middleton le esperaba abajo, muy atenta.
Para los juegos de mesa, ha formado equipo con su padre, sobre el que aparece sentado mientras disfrutan de una partida a la que se unen sus abuelos maternos. Michael y Carole Middleton han estado todos estos meses completamente volcados en su hija y sus nietos, ayudando para que pudieran seguir adelante con sus rutinas en casa y esforzándsoe para que la enfermedad de la Princesa no cambiara demasiado el día a día familiar.
La prioridad de Kate Middleton
Proteger a sus hijos en esta etapa tan complicada ha sido siempre el deseo de Kate Middleton. Ella misma explicaba que necesitó tiempo para poder hablar de su enfermedad con los príncipes George, Charlotte y Louis de una forma "apropiada para ellos y asegurarles que voy a estar bien". De hecho, la nuera de Carlos III, quien atraviesa una situación muy parecida ya que fue diagnosticado de cáncer prácticamente al mismo tiempo, comunicó la noticia de su enfermedad coincidiendo con el primer día de las vacaciones escolares de Pascua.