Jacques y Gabriella de Mónaco están a punto de cumplir 10 años, y no son ningunos advenedizos en la agenda pública. Como es costumbre entre los Grimaldi, los más jóvenes, desde muy pequeños, acompañan a sus padres en determinados actos, acordes con su edad, días festivos o actividades de carácter lúdico o deportivo, pero este lunes los mellizos de los príncipes Alberto y Charlene han debutado en su primer acto puramente institucional demostrando una vez más que siguen siendo los royals de su generación con la agenda más intensa.
Se trata de la toma de posesión del ministro de Estado de Mónaco, nombrado por el Gobierno francés en el Consejo del Príncipe. La ceremonia ha tenido lugar en el Palacio Grimaldi en presencia del secretario de Estado, de los miembros del Gobierno y del gabinete del Príncipe, además de la la familia del Soberano. La institucionalidad del acto exigía traje y corbata, como bien lucían padre e hijo. Charlene ha apostado por una americana azul celeste con pantalón blanco y su hija iba impecable con un vestido corto azul marino con falda plisada.
Ha llamado la atención la profunda profesionalidad de los niños, que se mantenían en su sitio con el gesto serio mientras tenía lugar la toma de posesión y mostraban una leve sonrisa ya en la foto de familia cuando, efectivamente, el gesto del resto de asistentes era también más distendido una vez concluida la sesión. Este nuevo nivel de la vida pública que acaba de estrenar es la evolución natural para unos príncipes que llevan ya muchos años desenvolviéndose con soltura en actos oficiales. Saben mantener la compostura con todo el respeto en la misa por el Día Nacional de Mónaco, igual que nos han regalado los momentos más divertidos y tiernos entre ellos en las festividades de Santa Devota.
La última vez que vimos a Jacques y Gabriella en público fue con motivo de los Juegos Olímpicos de París, cuando participaron con sus padres en la ceremonia del traslado de la antorcha. Allí, los vimos con ropa deportiva y gafas de sol, celebrando el espíritu deportivo de este evento internacional que tanto significa para su madre, que antes de convertirse en Princesa fue nadadora profesional y miembro del equipo de relevos de 4×100 m estilos de Sudáfrica en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000.
Con el acto de este lunes, la familia principesca retoma la agenda tras el descanso estival, pero para Jacques y Gabriella la verdadera vuelta al cole será en tan solo unos días, cuando regresen a las aulas del centro monegasco François d'Asside-Nicolas Barre. Es habitual que el primer día protagonicen un posado, acompañados de sus padres o solos, para marcar esta nueva fase en su formación. Por el momento, ambos reciben la misma formación, igual que acuden juntos a los actos en los que participan, pero Jacques es el heredero y llegará un momento que su preparación será otra. Su padre, consciente de ellos, ya explicó que le recomendará recibir formación militar. En cuanto a su hermana, Gabriella, asegura que también tendrá responsabilidades en el futuro, de igual forma que ahora Carolina y Estefanía son apoyos fundamentales para el jefe del Estado.