Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett van a protagonizar la primera gran boda real tras el verano. Un enlace que ha levantado una gran expectación y que contará con varias celebraciones que arrancarán este mismo jueves. Será el broche perfecto a una historia de amor que comenzó hace cinco años. El camino hasta el altar no ha sido fácil. Su relación ha estado marcada por las críticas y algunas polémicas desde el principio, pero ha logrado consolidarse contra viento y marea. En el espectacular fiordo de Geiranger, rodeados de la Familia Real y de muchos amigos venidos de todos los rincones del mundo, la pareja se unirá en matrimonio. Un ‘sí, quiero’ que se podrá ver en exclusiva mundial en ¡HOLA! y su publicación hermana HELLO!. Durante este fin de semana podrás seguir la cobertura en directo en HOLA.com y en el número de la revista ¡HOLA! que se pondrá a la venta el 4 de septiembre. Se publicarán las imágenes exclusivas de los tres días de celebración con todos los detalles, sorpresas y momentos más emocionantes. A falta de escasos días para el gran acontecimiento del año en Noruega, analizamos las diferencias y semejanzas de esta boda con otras que han tenido lugar en el seno de la Casa Real que lidera el rey Harald.
© Getty ImagesUna boda real a su manera
La principal diferencia de esta boda real con otras que han tenido lugar en la Corte noruega es que es una ceremonia a su manera. Marta Luisa y Durek son más libres ya que ella, aunque es Princesa, no pertenece a la Casa Real noruega ni realiza labores de representación. Una decisión que vino generada después de que hubiera cierto malestar entre la opinión pública al no quedar del todo clara la distinción entre sus propias actividades comerciales y su vinculación con la Casa Real. En noviembre de 2022, un comunicado oficial informaba que la Princesa dejaba sus funciones oficiales y que no podría usar el título de princesa ni hacer ninguna referencia royal para promocionar sus negocios. Sin embargo, y por expreso deseo de su padre, conserva el título de Princesa y mantiene la excelente relación familiar de la que siempre ha gozado con sus padres y su hermano.
Se trata, pues, de una boda real, que no oficial, de una princesa de cuna, hija de un monarca reinante, pero que ya no ejerce como tal, y por eso este enlace es a la medida y a la manera de los novios. Ellos se han involucrado al máximo en los preparativos y, en este caso, los Reyes y los príncipes herederos ejercen como invitados a un acontecimiento privado. La Casa Real no ha intervenido en la organización y tan solo se ha limitado a comunicar que miembros de la monarquía acudirán.
Con la presencia de toda la familia
La ruptura con la Casa Real de la princesa Marta Luisa no ha supuesto ninguna escisión en el ámbito familiar. Harald y Sonia de Noruega siempre se han mostrado comprensivos y cariñosos con sus hijos. Cuando se anunció el compromiso, Harald dijo en un comunicado: “La Reina y yo estamos encantados de que la princesa Marta Luisa y Durek Verrett hayan anunciado hoy sus planes de boda. Estamos encantados de incluir a Durek en nuestra familia y esperamos celebrar el gran día con ellos. Deseamos a Marta y Durek todo lo mejor”. Forman un núcleo familiar muy unido y por eso todos juntos estarán el sábado en el gran día de la Princesa. Esta es una de las semejanzas que esta ceremonia tendrá con la del príncipe Haakon y la princesa Mette-Marit. La Familia Real al completo acompañó al heredero al trono y su prometida, y así ocurrirá el sábado. La Casa Real ha confirmado que los reyes Harald y Sonia, los príncipes Haakon y Mette-Marit; sus hijos, la princesa Ingrid, segunda en la línea de sucesión al trono y llamada en un futuro a ser Reina, el príncipe Sverre Magnus; y la princesa Astrid, tía paterna de la novia estarán presentes. También tendrán un papel destacado las tres hijas que la princesa Marta Luisa tuvo con Ari Behn: Maud Angelica (21), Leah Isadora (19) y Emma Tallulah (15), quienes tienen una relación excepcional con su madre y con el chamán Durek.
Un fiordo en lugar de una Catedral
La boda de Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett tendrá lugar en el fiordo Geiranger, un lugar de cuento, declarado Patrimonio de la Unesco. Un escenario bien diferente al que en 2001 acogió el matrimonio de su hermano Haakon y Mette-Marit Tjessem Hoiby, quienes se casaron en la Catedral de Oslo el 25 de agosto de 2001. También los padres de Marta Luisa se casaron en este lugar. El obispo Gunnar Stalsett ofició la boda y habló sobre el amor basándose en una lectura de los Corintios. En el caso de Marta Luisa será la reverenda Margit Lovis Holte, perteneciente a la Iglesia Noruega, la encargada de consagrar la unión de los novios. Junto a la reverenda estará Michael Beckwith quien hará un saludo. Michael es fundador y director espiritual del Nuevo Pensamiento del Centro Espiritual Internacional Agape en Beverly Hills (California), una comunidad transdenominacional, con miembros, practicantes espirituales, ministros y ministerios en todo el mundo. El movimiento Nuevo Pensamiento es una corriente religiosa que surgió en Estados Unidos a principios del siglo XIX y que sus seguidores consideran sucesor del ‘pensamiento antiguo’. Se trata de la sabiduría y la filosofía acumuladas a través de las culturas griega, romana, egipcia, china, taoísta, hinduista y budista.
© Hotel Union GeirangerY un hotel en lugar de un Palacio Real
Hace 23 años, Haakon y Mette-Marit se convirtieron en marido y mujer. Tras la ceremonia religiosa en la Catedral de Oslo, los recién casados se dirigieron en coche descubierto por las calles de la capital noruega hasta el Palacio Real, desde cuyo balcón saludaron a la multitud que les esperaba, igual que hicieron los reyes Harald y Sonia el 29 de agosto de 1968. El banquete consistió en una cena que tuvo lugar en la residencia real en la que estuvieron presentes representantes de Casas Reales europeas, además de funcionarios, representantes de la vida oficial, familiares y amigos.
La hermana del heredero a la Corona noruega también celebrará su matrimonio con una cena de gala, pero tendrá lugar en el Hotel Union, en el mismo fiordo donde tendrá lugar la ceremonia, y en el salón llamado Geirangersalen, el espacio más grande de todo el establecimiento con una altura de 5,5 metros y unos ventanales panorámicos. A ello le seguirá un vals nupcial, que aún no se sabe qué pieza será. Los príncipes Haakon y Mette-Marit bailaron, por primera vez como matrimonio, el vals La vuelta al mundo de Víctor Young.
Paseo en barco en la víspera al Día D
Al igual que ocurrió en la boda de su hermano, Marta Luisa de Noruega también va a ofrecer a sus invitados un paseo en barco en la víspera de su enlace. Por la mañana todos los invitados subirán a embarcaciones para dar un agradable paseo donde se servirá un almuerzo mientras se observa desde el agua los impresionantes paisajes de esta zona de Noruega.
El día antes de su boda, Haakon y Mette-Marit, a bordo del barco real, realizaron una travesía en la que también participaron los jóvenes miembros de la realeza, entre ellos el entonces príncipe Felipe, una especie de preboda que sirvió para estrechar lazos antes de la ceremonia. El yate de la Corona noruega es uno de los dos únicos barcos reales que aún están disponibles en Europa. A bordo de ellos pueden llevarse a cabo eventos oficiales y son como una especie de palacios flotantes.
La presencia de los ‘royals’
Las nupcias de Marta Luisa y Durek suponen la primera boda real noruega desde que Haakon y Mette-Marit se casaron. Aunque ya no es alteza real, a la familia del rey Harald le sigue gustando invitar a miembros de la realeza a los grandes eventos como fue en junio de 2022 la fiesta por el 18º cumpleaños de la princesa Ingrid, a la que acudieron familias reales de Noruega, Bélgica, Bulgaria, Dinamarca, Países Bajos, Grecia, Suecia, Luxemburgo y España.
© Getty ImagesA pesar de no ejercer como miembro activo de la Casa Real, Marta Luisa de Noruega tiene excelentes relaciones con muchos príncipes y las monarquías escandinavas están de lo más unidas. Además, cabe destacar que la princesa Alexia de Grecia es una de las madrinas de bautismo de Emma Tallulah, la hija pequeña que la Princesa tuvo con Ari Behn y la princesa Laurentien de los Países Bajos, cuñada del rey Guillermo, es madrina de su hija mediana, Leah Isadora, así que podría haber representación de algunas Casas Reales.
En el caso del príncipe Haakon, su boda fue la de un heredero al trono y estuvo llena de miembros de las Familias Reales de Europa, entre ellos doña Sofía y el rey Felipe, Guillermo y Máxima de Países Bajos, Carlos de Inglaterra, Alberto de Mónaco, Victoria, Carlos Felipe y Magdalena de Suecia, Margarita de Dinamarca o los grandes duques de Luxemburgo.
Una bonita coincidencia
La boda de Marta Luisa, al igual que la de su hermano y sus padres, tendrá lugar a finales de agosto. Los actuales reyes noruegos contrajeron matrimonio el 29 de agosto de 1968 tras nueve años de noviazgo y se celebró por la tarde ante 850 invitados. El príncipe heredero Haakon se convirtió en un hombre casado el 25 de agosto de 2021 y la princesa Marta Luisa lo hará el 31 de agosto, una bonita coincidencia que la conecta aún más con su pasado familiar.
