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Gran recibimiento en Grasten a Federico y Mary de Dinamarca. La pareja real ha tenido una gran acogida por parte de los habitantes de esta localidad al sur de la península de Jutlandia donde disfrutan ya de su primer verano como reyes. Miles de personas acudieron a las inmediaciones de la plaza principal del municipio, donde se extendió una alfombra roja y no faltaron flores, pancartas y banderas para dar la bienvenida a los soberanos daneses. Federico y Mary fueron recibidos por el alcalde del municipio de Sonderborg, Erik Lauritzen, y como agradecimiento una niña le hizo entrega de un ramo de flores a la Reina, con quien coincidió en su look al lucir un diseño floral.
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Mary de Dinamarca eligió un vestido en blanco con estampado floral en verde y manga abullanada de la firma ME+EM, unas sandalias de cuña y como complemento un sombrero de ala redonda de Canopy Bay, mientras que Federico un traje en color azul marino a juego con su corbata de rayas. Como novedad, este año los Reyes eligieron caminar desde la plaza por Slotsgade hasta el castillo de Grasten en lugar de ir en coche. Durante el recorrido por las calles de la localidad, los reyes hicieron gala de su simpatía saludando a infinidad de admiradores reales que se habían acercado a verlos. El paseo terminó de una forma emotiva cuando un coro cantó "Der er et yndigt land", el himno nacional en honor de los monarcas a su llegada al castillo de Grasten, residencia estival de la Familia Real danesa.
Una vez más, pusieron de manifiesto la complicidad que existe entre ambos. Los gestos de cariño, las miradas y las sonrisas se sucedieron, lo que viene a reiterar que atrás quedaron los rumores de crisis que surgieron a raíz de las fotos de Federico de Dinamarca con Genoveva Casanova.
Federico y Mary no son los únicos miembros de la Familia Real que han llegado la residencia veraniega de los monarcas daneses, el castillo de Grasten, también lo han hecho sus hijos pequeños, los mellizos Vincent y Josephine, de 13 años, que ya se han instalado en las dependencias palaciegas. A ellos es muy posible que se unan los otros dos hijos de los reyes, la princesa Isabella, de 17 años, y el príncipe heredero Christian, de 18, ya que se perdieron el primer viaje oficial a Groenlandia de sus padres como soberanos y donde sus hermanos pequeños, Vincent y Josephine acapararon todas las miradas. Además de sus hijos, a sus planes veraniegos se unirán la reina Margarita y la princesa Benedicta, tía del Rey.
Grasten ha sido el lugar de veraneo de la Familia Real danesa desde hace casi un siglo. En1935 los reyes Federico IX e Ingrid, abuelos del rey Federico X, obtuvieron el derecho a disfrutarlo como regalo de boda. Después la reina Margarita siguió disfrutando de este castillo en el periodo estival y este año por primera vez Federico y Mary de Dinamarca se convertirán en los principales anfitriones tras ser proclamados reyes. En estas dependencias la familia real disfruta de sus jardines, una de las joyas de este recinto de inspiración inglesa, y practica deportes como el golf, la hípica o el tenis.
Durante la estancia de la familia real no se permiten las visitas a los jardines del castillo, sin embargo, la iglesia sí estará abierta para los servicios religiosos y la Guardia Real marchará todos los días por la ciudad hasta el castillo y habrá un cambio de guardia a las 12 del mediodía. Una de las tradiciones veraniegas es Grasten Ringridning, un desfile ecuestre y un torneo inspirados en la época medieval, que se celebra el tercer fin de semana de julio para dar la bienvenida a la familia real. Este año se celebrará del 19 al 21 de julio y en él participarán 300 jinetes y más de 100 niños en bicicleta delante del palacio donde se hospedan los reyes.