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Quedan dos meses para su boda y Marta Luisa de Noruega y su prometido, el chamán de las estrellas de Hollywood Durek Verrett, ya se han visto envueltos en una nueva polémica. En esta ocasión, el gurú espiritual, muy acostumbrado a recibir críticas por sus comentarios sobre cómo entiende la vida y las enfermedades, se ha librado de los dardos de la opinión pública y ha sido la Princesa la protagonista de la controversia. La hija de los reyes Harald y Sonia ha roto el pacto con la Casa Real que estipuló que dejaba de trabajar para la realeza noruega y así poder desarrollar sus actividades empresariales de forma libre, eso sí, sin poder usar su título que conserva por expreso deseo de su padre.
Hace unos días, Marta Luisa y Durek hicieron una fiesta con su círculo de amistades más cercano, donde presentaron el lanzamiento de una de las bebidas de su boda, que tendrá lugar el 31 de agosto en un espectacular fiordo noruego. En colaboración con Oslo Handverksdestilleri y Fentimans, la pareja ha creado una ginebra única del tipo Pink Gin de color rosado en lugar de transparente con la etiqueta blanca con dibujos de arándanos, frambuesas y grosellas negras.
El problema vino cuando se vio el reverso de la ginebra. Tanto su título de Princesa como su monograma, los símbolos que la distinguen como miembro de la realeza nórdica, aparecían en la botella. Una fatal equivocación, ya que desde 2002, la princesa Marta Luisa no puede usar su condición royal para vender productos. El futuro matrimonio ya ha tomado medidas y han quitado las ginebras que estaban mal etiquetadas. “Lamentablemente, hubo un error, por lo que el título ya ha sido eliminado de la página web de la destilería y en el próximo lote también se quitará de las botellas”, ha dicho a VG Carina Scheele Carlsen, representante de la Princesa.
Además de por infringir el acuerdo con la Casa Real, algunos sectores no han visto con buenos ojos la inmersión de la Princesa y el chamán en el sector de las bebidas espirituosas. En Noruega el alcoholismo es un importante problema social y se está debatiendo la prohibición de la publicidad de bebidas con graduación. “Es una pena que la princesa Marta Luisa y Durek Verrett hayan decidido convertir su boda en un cartel publicitario del alcohol”, ha afeado Ragnhild Kaski, secretaria general de la organización Av-og-til, que trabaja por combatir las consecuencias del alcoholismo.
En noviembre de 2022, un comunicado emitido por la Casa Real noruega informó que “la princesa Marta Luisa quiere contribuir a una distinción más clara entre sus propias actividades y la conexión con la Casa Real. Por lo tanto, la Princesa, en consulta con Su Majestad el Rey y la familia inmediata, ha decidido que en este momento no desempeñará funciones oficiales para la Casa Real”. Como su unión y sus negocios con su novio habían generado cierta inquietud por si usaba su condición para promocionarlos, “la Princesa quiere contribuir a hacer más clara la distinción entre sus actividades empresariales y su lugar en la Familia Real y no debe usar el título de Princesa ni referirse a miembros de la Casa Real en sus propios canales de redes sociales, en producciones de medios o en relación con cualquier actividad comercial”.
