El concierto que Taylor Swift dio el pasado fin de semana en el estadio de Wembley pasará a la historia. Y no solo por el insuperable espectáculo de la artista, que estuvo durante más de tres horas sobre el escenario, sino también por el encuentro que protagonizó con el príncipe Guillermo y sus dos hijos mayores, George (10) y Charlotte (9) de Gales, quienes son unos auténticos swifties. El heredero al trono y sus niños no pararon de cantar y bailar en las gradas los temas incluidos en The Eras Tour y, ya finalizado el show, quisieron felicitar a la artista personalmente y se hicieron un selfie viral al que se unió su novio, Travis Kelce. El jugador de fútbol americano, que hizo por sorpresa un 'cameo' en uno de los números musicales, ha contado cómo fue ese encuentro, ha desvelado lo que más le sorprendió de los miembros de la Familia Real británica y ha explicado por qué la princesa Charlotte se ganó su corazón.
En el pódcast que comparte con su hermano, también presente en el concierto, el deportista ha asegurado que "fue un absoluto placer conocer" a Guillermo de Inglaterra y sus hijos. Los definen como "personas maravillosas" y destacan de los tres que "tienen los pies en la tierra". Ha recordado entre risas que, cuando se vieron entre bambalinas, no sabían muy bien cómo actuar ni el protocolo a seguir para saludar: "No sabía si tenía que hacerles una reverencia o simplemente darles la mano". Tal y como han comentado en la emisión de este lunes de New Heights con Jason y Travis Kelce, pasados esos segundos de incertidumbre inicial, todo fluyó con naturalidad y no faltaron las risas, la conversación amena y las fotos para el recuerdo.
El jugador de los Kansas City Chiefs y su hermano han destacado de este encuentro a puerta cerrada el carisma de la princesa Charlotte, que logró conquistarlos a ellos y también a Taylor Swift: "El príncipe Guillermo estuvo fantástico, pero lo mejor fue la princesa Charlotte. Era tan adorable... El príncipe George también estuvo genial". Han definido a la nieta de Carlos III como "una superestrella" que se mostró apasionada, como se pudo ver cuando comenzó a bailar Shake It Off desde su asiento. Esa espontaneidad también quedó reflejada al conocer a la artista y a su entorno, momento en el que no dejó de hacer preguntas, una parte que los Kelce destacan como "la más divertida". En este sentido, han elogiado la labor de los príncipes de Gales como padres al fomentar que su hija lidere una conversación y la animen a participar y a expresarse.
No era la primera vez que el príncipe Guillermo saludaba a Taylor Swift. Hace una década, cuando el alcance de la cantante aún no había alcanzado las cifras meteóricas de la actualidad, compartió escenario con ella y con Jon Bon Jovi. Convertidos en un improvisado grupo musical, interpretaron Livin' on a Prayer en el escenario de un evento benéfico de Centrepoint celebrado en el Palacio de Kensington. Precisamente de este momentazo ha hablado también ahora Travis Kelce. "Se lo pasaron bomba y eso demuestra lo agradable que es (haciendo referencia al heredero al trono)".
Un cumpleaños diferente para el príncipe de Gales
El príncipe Guillermo disfrutó del concierto de Taylor Swift horas después de su 42 cumpleaños, una nueva vuelta al sol que llega en un momento complicado marcado por la enfermedad de su mujer. Kate Middleton reapareció hace unos días en el Trooping the Colour, su primera salida pública desde diciembre y también la primera desde que comunicó que padece cáncer. La princesa de Gales está recibiendo un tratamiento de quimioterapia preventiva y ha optado por vivir este proceso en completa intimidad, rodeada de sus más íntimos, alejada del foco mediático en Adelaide Cottage y completamente volcada en su salud. " Estoy progresando bien, pero como cualquiera que esté pasando por quimioterapia sabe, hay días buenos y días malos. En esos días malos te sientes débil, cansado y tienes que ceder a la necesidad de descansar. Pero en los días buenos, cuando te sientes más fuerte, quieres aprovechar al máximo el sentirte bien.", aseguraba.