En estos primeros diez años de la era de Felipe VI, el monarca ha basado su reinado en tres pilares fundamentales: servicio, compromiso y deber. Desde aquel histórico 19 de junio de 2014, ha tenido en doña Letizia un gran apoyo puesto que, "con voluntad, dedicación y sensibilidad, su actividad ha contribuido enormemente a dar visibilidad y atención a las necesidades de las personas, especialmente las más vulnerables". En la última etapa, la princesa Leonor y la infanta Sofía han dado un paso al frente y su presencia en la agenda es cada vez más intensa. Al hacer balance de esta década, también cabe destacar una quinta pieza que es clave: la reina Sofía (85), quien ha seguido teniendo un gran peso en la vida institucional.
Cuando Felipe VI fue proclamado rey ante las Cortes Generales dijo: "Me permitirán también que agradezca a mi madre, la reina Sofía, toda una vida de trabajo impecable al servicio de los españoles. Su dedicación y lealtad al rey Juan Carlos, su dignidad y sentido de la responsabilidad, son un ejemplo que merece un emocionado tributo de gratitud que hoy -como hijo y como Rey- quiero dedicarle". Con esas palabras dejó claro que el ejemplo de su madre serviría de inspiración para su reinado y que doña Sofía seguiría siendo uno de los principales activos de la Corona española. Así ha sido. Desde 2014 ha seguido manteniendo su agenda, con una gran presencia de actos relacionados con la educación, la inclusión social, el medio ambiente, la mujer y la salud. Estos ámbitos son también el motor de la fundación que lleva su nombre, en la que está muy implicada.
Consciente de las responsabilidades que tiene la princesa Leonor, especialmente tras su mayoría de edad, momento en el que se comprometió con la Corona mediante la jura de la Constitución, doña Sofía también se esfuerza por acompañar a su nieta en esta etapa que cada vez conlleva más desafíos y cambios. La heredera al trono sabe bien que es el futuro (y también el presente) de la monarquía, un camino en el que cuenta con el consejo de su abuela, quien la ha acompañado orgullosa en citas tan importantes de la última década como los premios Princesa de Asturias.
Precisamente, al debutar en ese acto en 2019, la primogénita de los Reyes resaltó lo mucho que significa para ella contar con la Reina. Lo hizo durante su histórico primer discurso, pronunciado en el Teatro Campoamor de Oviedo: "Me gustaría dar las gracias también a mi abuela, la Reina Sofía. Ella sabe lo importante que para mí es su presencia en esta ceremonia, que significa tanto para Asturias y para toda España". Desde entonces, en cada edición está presente la madre de Felipe VI, cuya mirada orgullosa al ver a su nieta creciendo institucionalmente dice más que muchas palabras.
La reina Sofía también está muy pendiente de su nieta pequeña, con la que comparte nombre. En sus apariciones conjuntas en estos diez años ha quedado patente su esfuerzo por resaltar su papel, que será muy relevante en el futuro de la monarquía como segunda en la línea sucesoria. Los que conocen a la hija menor de los Reyes destacan que "tiene una alegría contagiosa y es pura empatía". Además, comparten la pasión por los animales, la música, el ballet y la naturaleza. Muchos consideran que Sofía de Borbón es la más Grecia de palacio y no pasa desapercibido el parecido físico con su tía abuela, la princesa Irene, que es inseparable de la reina Sofía.
Escapadas familiares y un compromiso para siempre
A pesar de su intensa presencia en la vida pública, lo cierto es que para la reina Sofía está siendo una etapa distinta, mucho más calmada y sosegada que le permite disfrutar de planes familiares y pasar tiempo con sus allegados. De hecho, en los últimos años sus visitas a Grecia han sido frecuentes para estar con su adorado hermano, el recordado rey Constantino, al que estaba muy unida y del que estaba muy pendiente, especialmente cuando su salud empezó a debilitarse hasta su fallecimiento en enero de 2023. También se lleva muy bien con su cuñada, Ana María de Grecia, y adora a sus cinco sobrinos: los príncipes Pablo, Nicolás, Alexia, Philippos y Theodora. Otro de us planes preferidos es pasar el verano en Palma, donde suele aprovechar para hacer salidas con sus nietos.
Durante 39 años tuvo una agenda imparable al lado de Juan Carlos I, con el que construyó desde cero una monarquía que llegó en un escenario convulso y que tuvo que hacer frente a numerosos desafíos. Ahora con esa etapa ya cerrada, disfruta de la paz que le aporta formar parte de una monarquía completamente asentada en la que ejerce como valioso apoyo del núcleo duro de la Familia Real: los reyes Felipe y Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía. Tiene muy claro cuál es ahora su lugar, puesto que no solo es Reina, sino que es también madre, hermana e hija de jefes de Estado. No recae sobre ella el peso principal de la Corona, pero sabe que su apoyo sigue siendo fundamental y su compromiso con la Institución es eterno.